Con Cristiano Ronaldo arrancando el encuentro sentado en el banquillo de suplentes y su sustituto en el once, Gonçalo Ramos, presentándose en sociedad con un magistral hat-trick, Portugal ha sacado este martes billete para los cuartos de final, donde se medirá a Marruecos, superando con muchísima superioridad (6-1) a una endeble Suiza, que ha mostrado tremendos agujeros en su juego defensivo y apenas ha asustado de cara a la portería rival.
Lo de Gonçalo Ramos, joven punta de 21 años del Benfica, ha sido algo escandaloso. No le han pesado en absoluto ni el escenario mundialista ni la sombra de un mito futbolístico como Cristiano y se ha mostrado como un auténtico killer del área. Era solo su cuarta internacionalidad absoluta, su primera como titular, y se ha comportado con un temple y una capacidad resolutiva dignas de veterano con galones. Si en el Benfica ha explotado este curso con 14 goles en 21 duelos tras aprender el oficio de Darwin Núñez en los cursos anteriores, este martes ha tirado la puerta abajo en el panorama del fútbol de selecciones en el mejor de los escaparates.
Dominio luso
La fase de intercambio de golpes del choque duró solo 17 minutos, el tiempo que tardó Gonçalo Ramos en hacer que la contienda saltara por los aires. Recibió de espaldas a la portería un servicio de Joao Félix y a la media vuelta empalmó un potente zurdazo por la escuadra sorprendiendo a Sommer. Con Portugal enviando a la red la primera ocasión clara de la contienda, era el turno de Suiza para tratar de establecer la igualada, pero le faltó pólvora y juego. Lo intentó en el minuto 29, con un lanzamiento de falta lejano de Shaqiri que se fue fuera por muy poco, pero eran los lusos los que dominaban los acontecimientos sin mayores sobresaltos.
Así, en el minuto 53, Pepe, colándose entre los centrales helvéticos, conectó un perfecto cabezazo a la salida de un córner ante el que nada pudo hacer el portero. El central luso se convirtió en el jugador más veterano en marcar en una eliminatoria en la historia de los Mundiales superando, a sus 39 años y 283 días, el récord que ostentaba el camerunés Roger Milla desde Italia’90, con 38 años y 34 días.
Un rodillo
Tras un tímido intento de Freuler como consecuencia de un mal despeje de Diogo Costa, fue Gonçalo Ramos el que pudo hacer el 3-0 antes del descanso, pero lo evitó Sommer en un mano a mano. Eso sí, el delantero no perdonó a la vuelta de vestuarios cuando remató en el primer palo un servicio de Dalot desde la banda derecha. Los de Fernando Santos jugaban al galope, desbocados, convirtiendo a los de Murat Yakin en meros espectadores. Solo cuatro minutos después, en el 55, llegó el 4-0, con Raphael Guerreiro culminando una transición ofensiva tan rápida como precisa.
El 4-1 de Akanji a la salida de otro córner fue un espejismo porque Gonçalo Ramos tenía aún algo que decir sobre el césped. En el minuto 67 firmó su tercer gol resolviendo un magnífico servicio de Joao Félix picando la bola por encima de Sommer y la fiesta fue ya completa. El público pidió a Cristiano Ronaldo, Fernando Santos le hizo saltar al césped en el minuto 73 y Rafael Leao, con un buen gol en el descuento, redondeó la exhibición.