En un municipio de una extensión tan reducida como Portugalete la creación de amplias zonas verdes es todo un reto. En este aspecto, la ciudadanía jarrillera verá crecer en los próximos años el que será el bosque periurbano Rivas-Ballonti, un espacio que aspira a convertirse en el principal pulmón verde de la noble villa. Así, desde ayer lunes, la primera fase de la creación de este bosque va tomando forma, ya que en las próximas jornadas se procederá al plantado de más de 1.100 ejemplares de especies autóctonas en una superficie de 55.000 metros cuadrados que, hace un par de décadas era un lugar en el que sólo había escombros y maleza. “Esta es la gran zona verde de Portugalete, un espacio de 100.000 metros cuadrados y estamos culminando la primera fase de este proyecto que es el bosque periurbano de Rivas-Ballonti”, explicó Mikel Torres, alcalde de Portugalete.
A lo largo de los últimos años, Portugalete ha ido acondicionando poco a poco esta zona echando toneladas y toneladas de tierra vegetal que, poco a poco, han ido creando la base de lo que, en un plazo de un lustro será un bosque de árboles autóctonos. Además, para que sea un espacio de esparcimiento y más fácilmente transitable, el Consistorio jarrillero ha colocado mobiliario urbano y se han ido creando una serie de senderos que facilitarán el paseo por esta zona. Con todo esto ya definido, ahora está llegando la hora de la verdad, el momento de empezar a plantar esos más de 1.100 árboles que darán color y vida a este nuevo bosque y en este proceso los escolares portugalujos van a tener un especial protagonismo, ya que, de forma simbólica, a lo largo de esta semana los estudiantes de varios centros educativos de la villa irán plantando algunos de los árboles. En la jornada de ayer lunes fue el turno de los estudiantes de sexto de Primaria del colegio Ruperto Medina. Con mucho mimo y dedicación echaron tierra y regaron uno de los abedules que formará parte de este bosque que limpiará el aire de Portugalete. Los resultados de esta acción irán viéndose poco a poco, a medida de que los árboles vayan creciendo, aunque ya se ven los brotes de algunos de los 200 ejemplares que se plantaron en una fase preliminar.
Una vez pase el verano, tal y como indicó Mikel Torres, llegará el momento de dar los primeros pasos de la segunda fase de este proyecto. “La segunda fase de este proyecto comenzará pasado el verano y consistirá en el plantado de más árboles en una zona más baja de este espacio de Rivas-Ballonti. También se continuará con el desarrollo de más instalaciones deportivas al aire libre como, por ejemplo, pistas de baloncesto y fútbol y un anillo de atletismo”, informó el primer edil jarrillero. De este modo, Portugalete verá crecer el que será su bosque periurbano, una zona de esparcimiento y de contacto con la naturaleza a escasos metros del bullicioso día a día del corazón de la noble villa jarrillera.