Pocas cosas hay más enriquecedoras que compartir actividades y experiencias con personas de otras generaciones. Por ello, es muy necesario tender puentes y crear puntos de encuentro entre la juventud y las personas mayores para que los jóvenes contagien a los mayores su energía y espontaneidad, mientras que estos últimos enseñan a las nuevas generaciones con la experiencia que han ido acumulando con el paso de los años y de las vivencias.
En este sentido, el Ayuntamiento de Portugalete ha organizado junto a Portugaleteko Aisialdi Sarea el programa Agenda 2030. Portugalete eta Ni, una iniciativa intergeneracional que busca unir a través del juego a los más jóvenes con los más mayores de la noble villa jarrillera. Así, estudiantes de centros educativos jarrilleros comparten mañana de juegos y experiencias con personas mayores del municipio para, de esta manera, seguir construyendo Portugalete entre todos y todas. “Esta línea de trabajo intergeneracional es muy importante porque desarrolla una sociedad más inclusiva, equitativa y justa. La sociedad debe ser construida por todas las personas que formamos parte de ella, cada una aportando desde el momento en el que se encuentra. Así mismo, destaca la importancia del juego en el desarrollo de conocimientos y competencias sociales y emocionales clave”, destacó Txema Ezkerra, edil de Juventud del Consistorio jarrillero.
Divididos por mesas, compartieron juegos y vivencias.
Esta iniciativa está compuesta por un total de cuatro sesiones y ayer miércoles la Gazte Gela de la noble villa portugaluja acogió el segundo de estos encuentros. Divididos en grupos, alumnado del colegio Karmengo Ama de Portugalete y personas mayores –muchas de ellas usuarias de los centros sociales jarrilleros– compartían juegos y unían su imaginación y su talento para dar solución a los retos que les iban planteando los dinamizadores. Con tan solo un globo y un papel, todo un grupo puede sonreír y hacer echar a volar su imaginación. Tengan la edad que tengan los integrantes del grupo en cuestión. Muestra de esta última afirmación es el gran ambiente que se vivió en la mañana de ayer miércoles entre los estudiantes de Karmengo Ama y las personas mayores que se animaron a tomar parte en esta iniciativa que busca ser solo el principio de un Portugalete cada vez más inclusivo y en el que la intergeneracionalidad esté más presente. En uno de los grupos se encontraban Uxue, alumna de Karmengo Ama y Teresa, usuaria del centro social Zubia. Ellas, junto a otros alumnos y personas mayores, acababan de estar jugando a pasarse un globo a la mayor velocidad posible y sin rebasar los límites que les marcaron los dinamizadores del evento. “Estoy como si estuviese con los nietos. Lo estoy pasando muy bien porque esta es una experiencia nueva y son unos chavales muy majos”, señaló Teresa. A su lado, Uxue también estaba disfrutando de la experiencia. “Estamos pasando un rato muy agradable y aprendiendo mucho de ellos. Para nosotros esto es una clase muy diferente y en la que aprendemos mucho”, indicó Uxue.
Al otro lado de la sala, Celia, María y Merche disfrutaron junto a Alazne, Asier, Alai y Aitor de esta actividad. “Nos lo estamos pasando muy bien con ellos, son unos chicos muy agradables”, explican mientras asumen el siguiente reto planteado por los dinamizadores. “Con estas sesiones aprendemos mucho porque los mayores han vivido cosas que nosotros no hemos vivido y circunstancias que ni podemos imaginar”, señalaron estos alumnos de Karmengo Ama que tendieron puentes entre generaciones a base de juegos.
En corto
Cuatro sesiones. Este programa está compuesto por cuatro sesiones en las que jóvenes y mayores se unen en torno a distintos juegos y experiencias.
Abierto. El programa que está abierto a la inscripción de más personas mayores. Para ello, habrá que contactar con Gazte Gela.