El final de la calle Maestro Zubeldia en su intersección con Ramón y Cajal ya cuenta con una imagen totalmente renovada y actual gracias a la culminación de los trabajos de urbanización de esta vía. Las labores se han desarrollado desde el pasado mes de marzo y el Consistorio jarrillero ha invertido 2,5 millones de euros en la ejecución de este proyecto que se divide en dos partes: la urbanización propiamente dicha de la calle y la conexión de esta zona de la noble villa a la recogida neumática de basuras.
En lo que se refiere a los trabajos de urbanización, la institución local portugaluja ha invertido 1,23 millones en la ejecución de los trabajos pertienentes para hacer de esta zona de Portugalete un espacio más amable y moderno. En este aspecto, cabe destacar que se han anchado las aceras que cuentan con una anchura de entre dos y cuatro metros, algo que permitirá, por ejemplo, a los hosteleros sacar terrazas en esta zona. Asimismo, las luminarias que estaban pegadas a las fachadas de los edificios han pasado a la historia y se ha colocado toda la iluminación pública a pie de calle. Por su parte, la calzada cuenta con una anchura de 3,10 metros y se conservan todos los aparcamientos y zonas de carga y descarga existentes antes del comienzo de los trabajos. La novedad para los conductores que suelen transitar por este punto de la geografía portugaluja es que esta calle pasa a ser de sentido único discurriendo hacia la calle Ramón y Cajal. “Eso nos ha permitido eliminar ese cruce peligroso al final de la calle junto al cementerio y también mejorar la seguridad de la circulación en este tramo de calle”, indicó Mikel Torres, alcalde de Portugalete.
Además, se ha aprovechado toda esta actuación para seguir ampliando la red de recogida neumática de basuras. Merced a las labores ejecutadas, más de 1.600 viviendas de la noble villa se sumarán a este sistema de recogida de residuos. Gracias a esta ampliación de la red de recogida neumática de basuras, desaparecerán del paisaje portugalujo un total de 30 contenedores de basuras en el ámbito que comprende las calles Maestro ZUbeldia, Ramón y Cajal, Alfonso del Pozo, Juan Antonio Zunzunegui, Vicente Durañona, Francisco Berriozabal y parte del grupo El Progreso. En este aspecto, la obra a realizar ha consistido en introducir una tubería de carbono de 360 metros de longitud que discurre por la calle Ramón y Cajal desde su intersección con Maestro Zubeldia hasta su cruce con la Avenida Repelega. Pero, además, esa tubería da origen a cuatro ramales que son los que permiten que, desde hoy mismo, las calles ubicadas en las inmediaciones de Ramón y Cajal anteriormente citadas puedan sumarse a esta manera de gestión de residuos en la que Portugalete fue pionera en Euskadi y que, hoy día, cuenta con una de las redes más extensas del Estado.