Pradales pone en marcha su plan para reducir la burocracia con una cumbre con diputaciones y Eudel

Defender la casa construida durante décadas, y apostar por realizar las reformas necesarias. Así podría resumirse el espíritu de la intervención del lehendakari Pradales en el pleno de control que ha celebrado este viernes el Parlamento Vasco, el mismo día en que se cumplían 45 años desde la aprobación del Estatuto de Gernika en referéndum. Imanol Pradales hizo compatibles la defensa de la calidad de vida que ha traído esa ley y el “buen” funcionamiento de esta arquitectura institucional, con una propuesta a futuro para mejorar y engrasar este sistema, con el objetivo de que sea menos burocrático y sea más cercano a la ciudadanía.

Comenzar a hacer un trámite ante la administración pública y que el asunto ponga a prueba la paciencia de la ciudadanía con un peregrinaje de ventanilla a ventanilla para conseguir los papeles necesarios es una escena cotidiana que podría tener los días contados. Imanol Pradales se ha fijado entre sus objetivos para esta legislatura reducir la burocracia y que, si la administración cuenta ya con los datos de un ciudadano o ciudadana, no se le exija de nuevo a esa persona que presente esos documentos, sino que las propias administraciones intercambien los datos con sistemas de interoperabilidad. En respuesta a una pregunta del PNV en el pleno de control celebrado en el Parlamento Vasco, el lehendakari anunció que el 13 de noviembre mantendrá una primera reunión en Ajuria Enea con las diputaciones forales y Eudel para “impulsar la desburocratización, la simplificación administrativa y la administración digital en el conjunto de las instituciones vascas”.

Cabe recordar que el Gobierno vasco, dentro de su programa de 17 leyes, prevé presentar una para la agilización y simplificación administrativa el año que viene. Ahora parece que se sientan las bases para activar ese plan. A la reunión están convocados Elixabete Etxanobe (diputada general de Bizkaia), Eider Mendoza (Gipuzkoa) y Ramiro González (Araba), así como la presidenta de Eudel, Esther Apraiz, todos ellos del PNV; además del departamento de Gobernanza, Administración Digital y Autogobierno, dirigido por Maria Ubarretxena. 

Un sistema "bueno y eficaz" pero con autoexigencia

En el pleno de control, el PNV formuló una pregunta a Imanol Pradales sobre el sistema institucional vasco, que le dio pie a realizar esta reflexión. El lehendakari puso en valor que el sistema es “bueno y eficaz”, que los servicios públicos son de calidad, y que la ciudadanía pone una nota de 7,6 a su nivel de vida. Aseguró que habrá muchas razones que puedan explicar esta situación, pero destacó entre ellas el “autogobierno” y el Estatuto de Gernika aprobado hace 45 años, que ha permitido poner en pie este sistema institucional. Un sistema basado en los “derechos históricos”, con una gobernanza multinivel y confederal que cree que ha funcionado bien pero que, ante los cambios y los nuevos retos, tiene que seguir “mejorando” en ese sentido desde una posición de autoexigencia.

En concreto, apostó por reducir la burocracia para facilitar la vida a la “ciudadanía, la empresa, las asociaciones”; innovar en digitalización, y mejorar para que las políticas públicas sean más eficaces. Lo resumió diciendo que, para que este sistema institucional siga siendo pionero, se tiene que “adaptar y mejorar la eficiencia” de la administración pública vasca.

Si hasta la fecha no ha sido posible reducir la burocracia ha sido por una combinación de factores, sobre todo, porque cada administración tiene su propio sistema, y porque la legislación sobre protección de datos es estricta, de ahí que sea necesario muchas veces que la propia persona interesada solicite y lleve sus propios documentos. El reto ahora está en simplificar todo el proceso y que no se le vuelvan a pedir los datos de los que ya dispone la administración, como explicó la propia consejera Ubarretxena en la entrevista con este periódico. El lehendakari explicó el objetivo. “Será un proceso que buscará construir entre todas y todos una administración vasca más ágil, más rápida y más competitiva. Una administración pública vasca adaptada al siglo XXI que mejorará el servicio público y la atención a las personas de este país.Estoy convencido de que, a través de la colaboración, los sistemas de las instituciones vascas serán capaces de dar nuevamente una respuesta adecuada a los retos de país del futuro. En ello pondremos todas nuestras energías”, garantizó.

Comisión Permanente

A las puertas del Parlamento, el lehendakari había realizado una reflexión más en clave de autogobierno y de relación con el Estado. Por un lado, en una referencia implícita a la izquierda abertzale sin citarla, dijo que “quienes apostamos por la vía estatutaria hace 45 años acertamos”. “Son otros los que han venido, de hecho, a la vía del autogobierno décadas después”, aclaró. Puso en valor lo construido pero, por otro lado, apostó al mismo tiempo por ensanchar el autogobierno con la percha de la disposición adicional del Estatuto, la que reconoce los derechos históricos y faculta a Euskadi a actualizar su autogobierno. Pradales apuesta por una “bilateralidad efectiva” con el Estado, un sistema de garantías “imparcial”, y que las competencias pactadas no estén sometidas continuamente a interpretaciones sobre su alcance y contenido.

Pero, antes de aprobar el autogobierno del futuro, el lehendakari pidió cerrar bien la carpeta del autogobierno vigente, consiguiendo que lleguen a la comunidad autónoma las 29 competencias que aún tiene que recibir en virtud del Estatuto de Gernika. En ese sentido, desveló que la reunión de la Comisión Permanente para abordar todo este proceso tendrá lugar de manera “inminente”. Será la primera reunión de este foro en los 45 años de historia del Estatuto de Gernika, y este encuentro inaugural lo liderarán el propio lehendakari y el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez. De esa forma, la negociación recibirá un impulso político.