Han pasado más de tres meses desde que el Parlamento Vasco designará a Imanol Pradales lehendakari. En aquel pleno el abrazo entre el nuevo líder del Gobierno vasco e Iñigo Urkullu marcó un cambio de ciclo, pero han tenido que pasar casi 100 días para que la política volviera a la Cámara Vasca.
Si el jueves se celebró el primer pleno ordinario en algo más de siete meses, este viernes el Parlamento Vasco acogía el primer pleno de sesión de control al Gobierno. Todos los focos se fijaron en el lehendakari y en el portavoz del principal partido de la oposición por ser el primer cara a cara parlamentario entre Imanol Pradales y Pello Otxandiano. Quizás las expectativas creadas fueron desmedidas porque ninguno de los dos se salió del camino marcado y el tono fue cordial, a pesar de que quedó patente desde el principio la profunda desconfianza que existe entre ambas partes.
Ante la acusación de falta de liderazgo institucional lanzada por Otxandiano, el lehendakari respondió que su idea de gobernanza se basa en la escucha activa y en el acuerdo, y pidió a EH Bildu un cambio de actitud respecto a la anterior legislatura, y que se sumen a los acuerdos que se alcanzan en el Parlamento Vasco y en otros foros.
Acusación de "falta de liderazgo institucional"
El portavoz parlamentario de EH Bildu comenzó su intervención con una felicitación por el artículo sin precedentes que el lehendakari ha firmado junto a la presidenta navarra, María Chivite, en el que defienden conjuntamente el régimen foral de financiación. Pero el tono amable enseguida dejó paso a la crítica porque Pello Otxandiano acusó al lehendakari de “falta de liderazgo institucional”, y para justificar su posición hizo referencia a las diferencias entre las diputaciones forales respecto a la conexión del TAV con Navarra, o a la política fiscal. El portavoz de EH Bildu, por el contrario, citó los acuerdos alcanzados en la diputación de Gipuzkoa entre su coalición y el PNV sobre fiscalidad o en favor del nuevo estatus político, lo que a su juicio es ejemplo de cómo se debe afrontar “los colosales retos sociales” a los que se enfrenta Euskadi.
Imanol Pradales respondió que su visión de país se basa en una “cultura democrática y en la gobernanza colaborativa”, recordando las interlocuciones que desde junio ha mantenido con partidos políticos, sindicatos, agentes económicos y sociales y representantes de otras instituciones. Para el lehendakari la clave para resolver los grandes retos de país a los que se refería Otxandiano y para demostrar liderazgo es la “búsqueda de un camino compartido”, y considera que esa gobernanza colaborativa se debe trabajar en el Parlamento Vasco. En ese punto, instó a EH Bildu a ser de verdad un “agente implicado” en las “importantes decisiones” con perspectiva de país que se deben tomar en Euskadi. El lehendakari cerró su intervención con un reproche claro a EH Bildu a quien culpó de intentar imponer su idea de país a una sociedad plural.
Evolución positiva de la economía
El lehendakari tuvo oportunidad de defender la buena salud de la economía vasca en su respuesta a la pregunta del portavoz del PP, Javier de Andrés, quien alertó sobre la perdida de autónomos y el aumento de trabajadores públicos en los últimos años en Euskadi, lo para el popular supone una pérdida de empleo productivo frente a un aumento de los costes. Pradales criticó la pretensión del líder del PP vasco de intentar enfrentar a los trabajadores del sector privado con el público, y destacó que en Euskadi existe la misma proporción que en Europa de empleo público y privado.
Además, afeó al popular la incoherencia de su discurso porque al tiempo que reclama una reducción del número de trabajadores públicos, exige “más profesionales en la sanidad, la educación y en la Ertzaintza”. “¿En qué quedamos?” se preguntó el lehendakari, quien tampoco dejó pasar la oportunidad de destacar ante de Andrés los buenos datos económicos ya que el PIB vasco lleva creciendo de forma ininterrumpida desde 2014, a excepción de en 2020 coincidiendo con la pandemia. Y recordó que las previsiones económicas señalan que la economía vasca crecerá este año un 2% y un 2,1% en 2025, al tiempo que es capaz de seguir creando empleo de calidad.
Además, Imanol Pradales señaló que su Gobierno siempre estará con las empresas a las que seguirá brindando apoyo al igual que “a los que arriesgan para crear riqueza y empleo”.