Osasuna visita al Granada (14.00 horas, Movistar LaLiga) y lo hace con dos refuerzos. Unai y David García, ya sin covid-19, se ejercitaron ayer junto al resto de sus compañeros en las instalaciones de Tajonar y se colaron en la convocatoria para un partido en el que el conjunto navarro tiene varios retos. El principal, volver a puntuar tras la derrota del pasado miércoles en Vigo, donde cayó ante el Celta (2-0), y romper su sequía goleadora a domicilio. Y es que los rojillos no marcan ni ganan lejos de El Sadar en Liga desde el pasado 17 de octubre, cuando asaltaron La Cerámica para derrotar al Villarreal (1-2). Desde entonces, el equipo de Arrasate acumula seis salidas consecutivas sin ver portería, con un escaso bagaje de dos empates sin goles (con el líder Real Madrid en el Bernabéu y con el colista Levante en el Ciutat de Valencia) y cuatro derrotas (en los estadios de Sevilla, Atlético, Getafe y Celta).
Con la enfermería ya no tan saturada (solo Aridane y Areso se encuentran lesionados), Osasuna afronta un reto complicado en Granada ante un rival que se encuentra un punto por debajo de los rojillos en la clasificación, pero que se ha hecho fuerte en su estadio, el Nuevo Los Cármenes, donde acumula cuatro jornadas consecutivas sin perder (tres victorias, incluida una remontada ante el Atlético, y un empate contra el Barcelona) y donde la estadística no acompaña a Osasuna, que solo ha ganado una vez en suelo nazarí, y ocurrió hace casi 64 años.
Arrasate recupera efectivos en la zaga para la cita de hoy. Unai y David García, ausentes el miércoles en Vigo por covid-19, regresan a una citación en la que se mantienen Unai Dufur e Iker Benito, que en Balaídos debutaron con el primer equipo rojillo (el central lo hizo de inicio y el extremo en los minutos finales), mientras que Ontiveros y Ramalho se quedaron en Pamplona, ambos por decisión técnica (el club espera que el primero, cedido por el Villarreal hasta final de temporada, busque otro destino en el mercado de invierno que cierra el 31 de enero).
Osasuna, que solo ha logrado una victoria en sus últimos 12 partidos ligueros y que recientemente puso fin a una racha de 10 jornadas sin conocer el triunfo, aspira a recuperar sus signos de identidad que ya exhibió ante el Cádiz en el El Sadar (2-0) y en la primera media hora del partido que el pasado miércoles perdió en Vigo (2-0). Las claves para conseguirlo y de paso obtener un buen resultado pasan por elevar su contundencia en ambas áreas para acabar con su sequía goleadora como visitante y para no encajar goles con tanta facilidad como en Balaídos, donde el Celta solo necesitó tres disparos entre palos para hacer dos goles. Osasuna se juega en Granada ante un rival directo disfrutar de un parón liguero desahogado y sin preocupaciones.