El tablero de juego de las elecciones municipales de Donostia despejará este domingo una de las pocas incógnitas que quedan. Quién será el cabeza de lista de los socialistas a la Alcaldía, una decisión que recae en los votos de los 452 afiliados donostiarras. Si el exregidor Odón Elorza, que fue batido por EH Bildu en 2011 tras veinte años en el cargo, o la actual portavoz socialista, Marisol Garmendia, que fue su estrecha colaboradora antes de pasar a formar parte del equipo de concejales socialistas y situarse como portavoz del grupo municipal tras la renuncia de Ernesto Gasco.
El anuncio de Elorza de presentarse como precandidato a unas primarias para tratar de ser alcalde de Donostia de nuevo no solo fue una sorpresa para muchos dentro de la familia socialista, sino que alteró una hoja de ruta que se presuponía continuista y proyectaba designar a Garmendia como lógica candidata, tras llevar las riendas el grupo municipal en los últimos años. Sus concejales, entre otros cargos del PSE, mostraron su apoyo a la aspirante, que dio a conocer con rapidez una lista con nombres suficientes para optar a las primarias. Elorza, por su parte, tardó más en conseguirlos y se rodeó de miembros de sus antiguos equipos de trabajo del Ayuntamiento, incluido el actual delegado del Gobierno en Euskadi, Denis Itxaso, que también fue concejal, entre otros.
Precisamente, la irrupción de Elorza en la contienda por llevar la batuta de Donostia ha sacado las primarias de la intimidad y ha puesto al PSE en el foco del interés, más allá de la afiliación. El propio Elorza se ha podido ver beneficiado de esa visibilidad y también Marisol Garmendia.
Elorza pone sobre la mesa su experiencia de años y su personalidad rebelde respecto a su partido mientras que Garmendia se ofrece como posible primera mujer alcaldesa de Donostia, con el aval de su trabajo de los últimos años al frente de distintas responsabilidades de los socialistas en el Ayuntamiento, donde gobiernan en coalición con el PNV, por segunda legislatura consecutiva.
La batalla está servida y aunque ambos candidatos se han mostrado educados con sus compañeros rivales, se ha abierto una brecha en el mundo socialista donostiarra, que los dos aspirantes se han mostrado dispuestos a cerrar en cuanto se conozca quien ha vencido.
Pero eso llegará este domingo, después de las 20.00 horas, cuando se cierren las urnas en las tres sedes del partido en la capital guipuzcoana: la de la calle Prim, donde votarán ambos aspirantes a una hora no desvelada, la de Altza y la de Intxaurrondo.
El nombre que salga de las papeletas, con voto secreto, se enfrentará al actual alcalde, Eneko Goia (PNV), el exregidor de EH Bildu Juan Karlos Izagirre, que retorna al ruedo municipal, el portavoz del PP, Borja Corominas, y quien encabece la candidatura en la que esté Podemos, que también celebrará primarias con un nombre por el momento, el de Víctor Lasa.