En una campaña para las elecciones europeas que parecía marcada por los choques del Gobierno español en el ámbito internacional con Israel y Argentina, y por los intentos de Vox de capitalizar dichos enfrentamientos, la semana decisiva de cara al 9-J ha virado definitivamente el debate hacia el proceso judicial contra Begoña Gómez, mujer del presidente español, Pedro Sánchez, tras la decisión del juez de llamarla a declarar el próximo 5 de julio, citación que dio a conocer en pleno fragor electoral.
La contienda partidista vuelve a centrarse, por tanto, en los partidos del bipartidismo tradicional, PSOE y PP, con un Vox que se encuentra ante su convocatoria con las urnas más propicia y que ahora aparece desdibujado. Socialistas y populares han elevado además el nivel de sus reproches mutuos, azuzados por una acción de la Justicia que ha adquirido velocidad de vértigo.
Y es que el juez Juan Carlos Peinado ha citado a testigos en domingo por ser su turno de guardia pese a no revestir la causa de urgencia, y someterá a Gómez a la pena de banquillo sin haber escuchado aún a dichos testigos y con el criterio en contra de la Fiscalía y del informe de cien páginas que emitió la UCO.
La contienda electoral siguió ayer miércoles echando chispas y el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, cargó contra Sánchez por señalar a jueces y periodistas en la carta a la ciudadanía, la segunda en poco tiempo, que difundió tras conocerse la citación a su mujer. En un acto en Extremadura, el líder popular aseguró que “ahora resulta que la culpa de lo que está ocurriendo en España la tienen los jueces, los periodistas o la oposición. ¡Es populismo en vena, populismo barato, populismo impropio de un país como España!”. Reprochó además la “actitud chulesca” y “la arrogancia” de Sánchez.
Por otro lado, el PP repartió entre sus dirigentes el argumentario de comparar la reacción de Sánchez con la del líder republicano en EE.UU., Donald Trump, tras su condena en el caso de la exactriz porno Stormy Daniels. “Ese señalamiento al juez lo podría hacer Trump cuando fue condenado, es populismo puro y duro”, dijo la secretaria general del PP, Cuca Gamarra. El portavoz del partido, Borja Sémper, acusó al líder del PSOE de usar el “manual del populista” con sus acusaciones a jueces y medios.
Ayer mismo, el PP presentó una denuncia ante la Junta Electoral Central (JEC) por la “utilización del Consejo de Ministros como instrumento en beneficio del PSOE y del presidente del Gobierno en plena campaña electoral”, tras los últimos pronunciamientos de los ministros en dichas comparecencias.
Begoña Gómez reaparece
La propia Begoña Gómez reapareció ayer en un mitin del PSOE en Benalmádena (Málaga) junto a Pedro Sánchez y a dirigentes socialistas que le dieron las “gracias” por acudir a ese acto. En su discurso, el líder del partido afirmó que “la máquina del fango se fundamenta en bulos y la democracia se basa en votos, así que el domingo a ganar a los bulos”. Sánchez añadió que “o se está con Milei, Netanyahu, Feijóo, Aznar y Abascal, o con el lado bueno de la historia, con la socialdemocracia en Europa”. Llamó por ello al voto socialista en las europeas a “quien quiera paz, justicia social y juego limpio”.
Los miembros socialistas del Gobierno volvieron a expresar su extrañeza por que haya trascendido en la recta final de campaña que Begoña Gómez ha sido citada para declarar como investigada. La portavoz del Ejecutivo, Pilar Alegría, recordó que “hay una norma, una ley no escrita de que no se dictan cuestiones judiciales en procesos electorales para no alterar los posibles resultados electorales”.
En esta línea, la vicepresidenta tercera del Gobierno y cabeza de lista del PSOE en las europeas, Teresa Ribera, aunque evitó hablar de prevaricación, calificó de “muy burdos” los últimos acontecimientos. El ministro de Justicia, Félix Bolaños, cargó contra la “campaña ultraderechista de fango y lodo” de PP y Vox, y pidió movilizarse el 9-J.