Cuando tenemos que ir un concesionario a elegir un coche nuevo o de segunda mano, solemos optar por los que más nos gustan visualmente y los que tienen todas las funciones y comodidades que estábamos buscando. Que sea automático, que cuente con suficientes caballos, que tenga mucho espacio en el maletero… En cambio, los agentes de la Policía y la Guardia Civil, a la hora de hacer los controles teóricamente aleatorios en la carretera, tienen una predisposición ante algunos tipos de vehículos, colores y gamas.
Esto no significa que si están en una misión de búsqueda no te vayan a parar por estar conduciendo algún otro coche que no entre en esta lista. Aunque los vehículos que te vamos a nombrar sean los más propensos a ser parados y revisados, también hay un porcentaje de los controles que se llevan a cabo al azar, precisamente para que los infractores no se sientan seguros de no ser vigilados.
Vehículos más vigilados en los controles
Furgonetas. Desde hace unos cuatro años, las furgonetas entraron en la lista de vehículos más vigilados de la Guardia Civil. La razón fue el aumento de las infracciones cometidas por los conductores de las mismas. Además, muchas de las furgonetas que vemos por grandes carreteras suelen servir para el traslado de materiales y sus conductores suelen pasarse largas jornadas al volante. Para evitar el aumento de riesgo de accidente, la Policía también está pendiente de que estos vehículos tengan limitador de velocidad y tacógrafos.
Coches negros, rojos y amarillos. Según los propios agentes, los coches de color negro, rojo o amarillo suelen ser los que más se asocian a la fiesta y a la velocidad entre los conductores más jóvenes, por los que tienen más posibilidades de ser detenidos en un control. El bulo de que los coches de estos colores son los que más accidentes tienen y las aseguradoras los penalizan más, con pólizas más caras, es un mito falso, según un informe de Mapfre.
Deportivos y de gran cilindrada. Aparte de los controles por drogas y alcohol, los controles de tráfico suelen controlar también la velocidad de los vehículos. Por ello, dado que los deportivos y los vehículos de ciertas gamas suelen correr más que los coches comunes o familiares, son más vigilados por los agentes en la carretera. Además, se buscan modificaciones ilegales en el motor, en el tubo de escape o inhibidores de radar.
Coches antiguos o en mal estado. Ya que los coches considerados antiguos (más de 15 años) no tienen las tecnologías y los avances de hoy en día en cuanto a evitar el desgaste, suelen ser también objetivo de los agentes. Si no tienen demasiados años pero por mal mantenimiento tienen un aspecto exterior deplorable, también entran en la lista de posibles paradas del control.
Con cristales tintados. En los últimos años se ha puesto muy de moda comprar coches con los cristales tintados o tintarlos posteriormente en el taller. Esta práctica puede ser muy útil para conseguir más privacidad, evitar mejor la radiación solar y que los cristales suelen tener mayor resistencia. No todos los cristales pueden ser tintados: la luna delantera está prohibida teñirla de negro y también existen materiales en los que no se recomienda este recubrimiento.
Modelos en el punto de mira. Los coches ‘marroneros’, que se paran más en los controles por lo que son los que más se comen el marrón, de ahí el nombre, suelen ser varios modelos específicos: