La ilusión de compartir la suerte y de ser agraciados con una sustancioso premio está latente en todo jugador de la Lotería de Navidad, el sorteo más especial del año. Quien más quien menos ya ha pensado o fantaseado qué hacer y en qué gastar el premio del Gordo u otro de los grandes si le tocase. Siete de cada diez ganadores se gastan el premio durante los cinco primeros años o antes. Un tiempo récord tras los que se encuentran, principalmente, la falta de conocimientos financieros y una mala gestión del dinero.
Según la experiencia y los sondeos, una de las prioridades de todo ganador es comprarse una casa nueva o pagar la hipoteca que ya tiene. Le siguen de cerca hacer una buena inversión para el futuro y ayudar a los familiares. En cuanto a las inversiones, dos de cada cinco apuestan por los bienes inmuebles. Hacer un viaje y ahorrar son otras de las finalidades indicadas. En cualquier caso, estas cambian según la cantidad de dinero que toca.
Estas son unas interesantes recomendaciones para gestionar el dinero proveniente de una gran premio de la Lotería.
1. Planifica. Determinar cuánto tiempo te durará el dinero será un punto importante para hacerte una composición de lugar lo más realista posible. El premio puede parecer cuantioso al principio, pero si empiezas a descontar impuestos o posibles deudas pendientes y divides el resto entre tu presupuesto de gastos anual, no lo serán tantos los años que te duren.
2. Revisa tus préstamos e hipotecas. Siempre se ha dicho que uno de los destinos del premio es "tapar agujeros". Es decir, saldar deudas pendientes. Y una de las más frecuentes es la que supone la hipoteca o un préstamo personal. Sin embargo, amortizarlos de golpe puede no ser la mejor opción.
De ahí que resulte fundamental que analices las condiciones de la hipoteca y el préstamo firmado, consultes si el tipo de interés es bajo, si existe alguna comisión por amortización anticipada, etcétera. En este caso, una buena opción es dejar el dinero apartado en una cuenta especial (que no tocarás) y programar transferencias periódicas.
3. No dejes tu trabajo. Otra de las tentaciones habituales es abandonar el trabajo, algo muy poco recomendable. Basta con dividir la cantidad por nuestro salario anual para ver que no es buena idea. Por no hablar de los años cotizados, de que si dejamos el trabajo no tendremos paro, etcétera. Una buena alternativa, en cualquier caso, sería invertir parte del dinero en montar un negocio propio. Tampoco conviene hacer ostentación ni dar pistas a los amigos de lo ajeno.
4. Invierte con cabeza. Si eres de esa gran mayoría que quiere comprarse una casa si le toca el Gordo, será conveniente analizar bien la rentabilidad de la propiedad que vas a adquirir. Estudiar el estado de la vivienda, a qué quieres destinarla (vivir en ella o alquilarla), si se encuentra en una turística o no, los precios del alquiler de la zona y su fluctuación a lo largo de los años, etcétera. Es interesante revisar informes de crecimiento o si hay proyectos urbanísticos de mejora en curso.
5. Diversifica tus inversiones. Puedes invertir una parte del premio en productos un poco más conservadores como depósitos, letras del Tesoro o bonos con menor riesgo y rentabilidad; y usar otra parte del dinero en productos más arriesgados como acciones o fondos de inversión. En la variedad de las inversiones está la clave del éxito.
6. Reserva una cantidad para imprevistos. Es aconsejable que no inviertas todo lo ganado, de esta manera dispondrás de una cantidad de dinero por si surgen problemas, otras oportunidades de negocio o imprevistos. En cualquier caso, ahorrar siempre es una buena opción.
7. Cuidado con los caprichos. Está bien que des uno o varios caprichos si te ha ha tocado el Gordo o un buen premio, pero cuidado con los derroches. Los expertos recomiendan que este capítulo no supere el 20% de la cantidad cobrada.
8. Busca asesoramiento profesional. Los consejos de un buen asesor financiero y/o fiscal determinarán tu perfil de riesgo, capacidad inversora, situación personal, etc. y te recomendará productos que se adapten a tus expectativas y necesidades.