El Pleno del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz ha mostrado su compromiso a estudiar la implantación de una tasa que grave la ocupación y uso privativo de la vía pública por parte de los grandes operadores postales que realizan entregas a domicilio en el municipio, en base a criterios medioambientales de sostenibilidad. Un canon conocido como la 'tasa Amazon' y que el Consistorio pretende analizar como "medida de apoyo al comercio local".
Los grupos municipales del PNV, PSE y Elkarrekin Vitoria han acordado examinar la posibilidad de implantar una nueva ordenanza municipal de cara a aplicar una "tasa de última milla", mediante una enmienda transaccional, aprobada con sus votos en el pleno celebrado este viernes en la capital alavesa y que ha contado con la abstención de EH Bildu y la negativa del Partido Popular.
Los departamentos municipales de Hacienda y Promoción Económica serán los responsables de analizar la viabilidad de aplicar esta nueva tarifa, tras realizar una reflexión conjunta con los agentes comerciales y de logística, para contribuir a "lograr la normativa más apropiada al fin que persigue".
La propuesta ha nacido de una moción del grupo Elkarrekin Vitoria que ha contado con la participación en pleno de las asociaciones de comerciantes locales Comercio Vitoria y Arabadendak, que han hecho uso del turno popular. Su presidente, Rubén Samperio, ha pedido que "Vitoria sea pionera a la hora de implantar" la 'tasa Amazon' a unas empresas que usan el espacio público "para compras que se realizan de forma online".
"APLICAR LA TASA AL CONSUMIDOR FINAL"
Samperio ha recordado que el comercio local supone "el 15% del PIB de la ciudad" y ha optado por aplicar el pago de la tasa "al consumidor final". Un nuevo canon que, según ha explicado, ya se aplica en países como "Noruega" y Barcelona lo analiza para su futura implantación. Los comerciantes han reclamado instaurar la "mesa del comercio" para debatir, en su seno y junto al sector, la posibilidad de regular esta nueva ordenanza.
La concejala de Elkarrekin Vitoria Garbiñe Ruiz ha expuesto la "competencia desproporcionada y desleal" que aplican estas multinacionales frente al comercio local y las consecuencias en "pérdida de empleo y cierres" que conllevan para los establecimientos de la ciudad. "El objetivo es apoyar al comercio local y reducir los impactos que producen los repartos a domicilio" en la ciudad, ha trasladado.
"DIFICULTADES" DE LA ORDENANZA
El concejal de Formación, Empleo y Comercio, Igor Salazar, ha puesto en valor el compromiso alcanzado para "estudiar la manera de elaborar la normativa", aunque ha expuesto "las dificultades" para abordar el asunto. "No es un tema sencillo, ya que Barcelona es el único ejemplo en la actualidad y hay que garantizar la seguridad jurídica a la hora de aplicar la tasa".
El concejal de Movilidad y Espacio Público, Raimundo Ruiz de Escudero, también ha hecho hincapié en los obstáculos que presenta la posible nueva ordenanza. "Hay que abordar un trabajo duro y tortuoso. No solo en realizar la ordenanza, sino en sensibilizar a la sociedad sobre los modelos de consumo, ha precisado.
Para la concejala de EH Bildu Iratxe López de Aberasturi la moción aprobada "no da respuesta a las peticiones del comercio local". "Falta elaborar una hoja de ruta que ponga los cimientos necesarios para que esta tasa se haga realidad".
Por su parte, la concejala del PP Blanca Lacunza ha pedido que el análisis "se produzca en la mesa del comercio" y se ha mostrado reacia a que la tasa afecte a "los repartidores y empresas de logística que contribuyen al bienestar de la sociedad".