Nacida en Bizkaia el 30 de agosto de 1972, es una periodista y presentadora conocida por haber sido el rostro de Eguraldia, el espacio del tiempo de Esukal Telebista, durante más de dos décadas. Su carismática presencia y cercanía la convirtieron en una de las figuras más queridas de la televisión vasca, siendo un referente en la información meteorológica.
Carrera profesional
Ana Urrutia se licenció en Periodismo en la Universidad de Navarra. Comenzó su carrera en EITB el verano de 1999, convirtiéndose rápidamente en una de las caras más reconocibles del canal. Durante más de dos décadas, ofreció información meteorológica con un estilo cercano y explicaciones accesibles, logrando fidelizar a los espectadores vascos. A lo largo de su carrera, cubrió numerosos eventos meteorológicos importantes y fue parte fundamental del equipo de EITB.
Durante todos estos años, Ana ha combinado su labor como presentadora de El Tiempo con la realización de reportajes en otros programas de la cadena, muchos de ellos centrados en fenómenos naturales de gran relevancia. Entre sus trabajos más destacados se encuentran reportajes de gran envergadura como la serie Planeta Azul, que exploraba la majestuosidad de la naturaleza, así como Convivir con el riesgo, una serie que reflexionaba sobre la relación del ser humano con los desastres naturales. También fue responsable de los especiales Inundaciones: 20 años después y Catástrofe del Prestige, donde profundizó en las consecuencias de estos trágicos eventos y su impacto a lo largo del tiempo.
Además de su faceta como reportera y presentadora, Urrutia ha estado involucrada en otros proyectos. Uno de los más destacados fue 20 segundos, un programa de publicidad que le permitió explorar nuevos formatos y ampliar su experiencia profesional. También tuvo la oportunidad de presentar dos temporadas de Surf in Euskadi, un programa que le permitió acercarse a un mundo con el que siempre se sintió muy conectada, y explorar la cultura vasca a través de este deporte tan característico de la región. Su pasión por el mar y su entorno natural fueron una constante a lo largo de su carrera.
Otro de sus logros fue ser durante tres temporadas la imagen del informativo Noticias para América en Canal Vasco, donde se encargó de llevar las noticias a la comunidad vasca en América, consolidándose como un rostro familiar y cercano para muchos de los espectadores más allá de las fronteras estatales. A lo largo de todo este tiempo, Ana Urrutia ha demostrado una gran versatilidad y dedicación, abarcando un sinfín de proyectos que reflejan su profesionalismo y pasión por su trabajo.
23 años en EITB y una despedida emotiva
Tras 23 años al frente del programa, el 28 de julio de 2022 Ana decidió dar un giro a su vida y emprender nuevos proyectos alejados de la televisión. Su despedida fue especialmente emotiva, ya que marcaba el cierre de una etapa profesional significativa. En su último programa presentando el Eguraldia, Ana aparecía descalza “para sentirse bien enraizada a la tierra”. Tras dar el parte del tiempo, sus compañeros le sorprendieron con un vídeo en el que diferentes personas importantes en su vida le enviaban mensajes llenos de cariño, lo que hizo que la periodista no pudiera contener las lágrimas. Finalmente, le entregaron un ramo de flores y, con un emotivo discurso, se despidió de todos los espectadores tras más de 10.000 programas, con palabras que calaron hondo: “Os voy a echar mucho, mucho de menos”. Pero su salida no se debió a una retirada definitiva de la vida pública, sino a su deseo de emprender un nuevo camino profesional. En entrevistas posteriores, explicó que sentía la necesidad de cambiar de rumbo y explorar otras pasiones.
Del plató a la esterilla
Tras su salida de la televisión, Ana Urrutia se ha volcado en el mundo del yoga y del bienestar personal. La periodista decidió enfocarse en la enseñanza del Yoga, una disciplina que había estado practicando de manera intensiva durante diez años y que se convirtió en su gran pasión. Ha dedicado los últimos años a formarse intensamente en esta disciplina y ahora se encuentra enfocada en impartir clases, ademas de promover un estilo de vida más consciente y saludable. Según explicó en distintas entrevistas, el yoga le ayudó a gestionar su vida de manera diferente, aportándole calma y equilibrio. Además, Ana también se ha dedicado al surf, otro de sus hobbies, que practica desde niña en las playas de Bakio, en la costa de Bizkaia.
Vida personal
Ana Urrutia siempre ha mantenido una vida privada discreta y alejada del foco público, priorizando su familia y su bienestar personal. Sin embargo, se sabe que está casada con Iker, con quien ha formado una sólida y estable relación. Juntos tienen dos hijas, con quienes Ana comparte una conexión muy cercana y cómplice, algo que ha expresado en varias ocasiones. A lo largo de los años, ha dejado claro que su familia es su principal apoyo y su refugio.
Tía y sobrino
Desde el año pasado, Ana Urrutia no es la única conocida de la familia ni la única que ha puesto el apellido Urrutia en el foco mediático. En el regreso de Operación Triunfo, un joven de 18 años captó la atención del público: Martín Urrutia, el sobrino de Ana. Su aparición en el popular programa provocó una gran expectación y rápidamente se convirtió en una figura mediática.
Hace unos meses, tía y sobrino protagonizaron una entrevista en el programa Ganbara de Radio Euskadi, donde compartieron diversas anécdotas sobre la fama de Martín y la forma en que ha cambiado la dinámica familiar. Durante la conversación, ambos comentaron con humor cómo la situación ha dado un giro inesperado: antes, era Ana Urrutia la que era reconocida en la calle y se detenían a pedirle fotos; ahora, es Martín quien acapara toda la atención, y es Ana quien, con una sonrisa, saca las fotos. Esta entrevista reflejó no solo la complicidad entre tía y sobrino, sino también cómo han sabido adaptarse y disfrutar de los cambios de la fama.
Actualidad
Aunque Ana Urrutia dejó la televisión, su legado sigue presente. Su cambio de vida refleja una tendencia creciente entre los profesionales de los medios que, tras años de exposición pública, buscan nuevas formas de bienestar y equilibrio personal. Ahora, en su nueva etapa como instructora de yoga, Ana sigue compartiendo su energía y conocimiento, pero desde un espacio diferente.
Su historia en un ejemplo de reinvención profesional, demostrando que nunca es tarde para seguir las pasiones y explorar nuevos caminos, incluso después de más de 20 años con una exitosa carrera de televisión.