Han coincidido el fin de las mascarillas obligatorias en interiores y su vuelta del internado de Gales en el que cursa Bachillerato para pasar las vacaciones de Semana Santa con su familia (real), y eso ha hecho que se haya podido ver la cara completa de la princesa Leonor después de dos años escondida.
Fue en la visita a un colegio de Leganés, en lo que supuso su segundo acto en solitario, Y algo en su rostro llamó la atención. Más allá de su evidente cambio físico, ya que antes de las mascarillas tenía un aspecto muy aniñado y ahora se ve más adulto, hay algo en su boca que sorprendió bastante: la princesa heredera no tiene los dos caninos superiores, los dientes comúnmente conocidos como colmillos, algo que no es habitual en una persona de dieciséis años.
No se sabe cuál es la causa, pudiera que ser que esas piezas dentales estén retenidas dentro del hueso y que haya que hacerlas aflorar con un tratamiento de ortodoncia o incluso con cirugía, o bien, en un caso menos probable, que no tuviera caninos definitivos, porque en imágenes de cuando era más joven sí tenía los de leche. En ese caso podría aprovechar los huecos para colocarse unos implantes.
La duda seguirá ahí. Ahora la princesa ya ha regresado a Gales después de unos días con su familia y con un amigo del internado que la acompañó cuando acudieron a celebrar el cumpleaños de su abuela y que se especula con que sea su novio.