Son días de comidas y cenas más copiosas de lo habitual, jornadas en las que los fogones echan humo. Y, aunque ya no se cocine tanto en casa como hace décadas, las familias siguen sentándose a la mesa alrededor de elaborados guisos. Por eso, las navidades son también época de pequeños incidentes domésticos: fuegos en sartenes, incendios en las campanas, calderas y braseros, quemaduras...
Accidentes que, en ocasiones, y no sólo en estas fechas, acaban con la intervención de los Bomberos. El pasado año, sin ir más lejos, los de Gasteiz realizaron 153 intervenciones por incendios y explosiones en viviendas y 21 en caseríos y edificaciones de la zona rural para solventar siniestros. Sin olvidar las 240 rescates y salvamentos en viviendas para ayudar a personas encerradas en sus pisos y los 37 para asistir a atrapados en el ascensor.