El Gobierno de Cantabria ha abierto un expediente informativo para decidir si cobra una tasa por rescatar a la pareja de espeleólogos que se perdieron en una cueva de Soba, de la que salieron ilesos anoche después de dos días de búsqueda, y quién tendría que pagarla, si ellos o la empresa que contrataron para alquilar el material.
Los espeleólogos castellanoleoneses no informaron al 112 de que habían entrado en la cueva ni de la hora que tenían previsto salir, aunque ese paso es necesario cuando se accede a una cavidad que, como la de Soba, forma parte del listado de las que exigen una autorización por su complejidad técnica.
La consejera de Presidencia, Isabel Urrutia, ha explicado, en declaraciones a RTVE en Cantabria recogida por EFE, que el Gobierno regional siempre abre un expediente cuando entiende "que se producen las causas por las cuales se impone una tasa".
En ese expediente se va a dilucidar, ha señalado, quién tenía la responsabilidad de informar al 112, si los espeleólogos o la empresa, si la responsabilidad se puede ceder a una empresa que se contrata o "si hubo mala fe" por parte de alguien.
Un operativo de 125 personas
En el rescate de la pareja, que desapareció el sábado en la cueva de la Garmiciega-Sima del Sombrero, participaron en total 125 efectivos, a los que el Gobierno de Cantabria ha agradecido este martes "su trabajo y profesionalidad" en un comunicado.
El operativo de búsqueda estuvo formado por técnicos de rescate, agentes del medio natural, equipo de drones y el Centro de Atención a Emergencias 112, Cruz Roja, UME, Guardia Civil, agrupaciones de voluntarios de Protección Civil y un equipo de rescate de Castilla y León.
Según la consejera de Presidencia, no se ha escatimado en medios humanos, con la participación de 39 efectivos en la primera jornada y 86 en la segunda, que han aportado 912 horas de trabajo, ni en recursos, con 11 vehículos en la primera jornada y 16 en la segunda, dos helicópteros y los drones del Ejecutivo.