No tienen mucho tiempo para descansar después de las horas dedicadas al trabajo. Y tampoco para hacer las cosas que les gusta. Lavar la ropa se vuelve incluso un reto, pero Iban García, Pablo Curiel y Borja Salazar, tres ingenieros bilbainos, han encontrado una forma de solucionarlo a través de su nueva app Colada. La aplicación, comentan los tres creadores, ayuda a que el usuario ahorre tiempo poniéndole en contacto con otra persona que lavará su ropa por él.
"Introduces tu dirección, te muestra un mapa, seleccionas la opción que más se ajuste a tus necesidades y luego eliges a la persona o colader más cercano a tu domicilio que hará la colada por ti, el día y la hora de recogida". Así explica el CEO de la aplicación, Iban García. Por cada paso que se realiza la aplicación envía notificaciones para que los clientes que usan la app estén informados en todo momento.
Los coladers son personas autónomas que, desde su hogar, ofrecen servicios de lavado, planchado, secado y servicio de recogida y entrega de ropa para que los usuarios se desentiendan de las tareas domésticas. En un clic los clientes podrán disfrutar de un servicio completo de lavandería. "Se trata de un modelo de negocio colaborativo en el que la seguridad, la confianza, la cercanía y una buena comunicación entre coladers y clientes son los factores clave que priman en esta aplicación, además del factor colaborativo que conlleva indudables ventajas económicas para ambas partes", expresan los tres ingenieros.
SERVICIO PUERTA A PUERTA
Asimismo, la aplicación hace posible la visualización del perfil de los coladers para generar vínculos de confianza entre los usuarios que usen Colada y, así puedan resolver dudas cuando soliciten un servicio de la aplicación. La app, rematan, pretende ofrecer un servicio personalizado y de "puerta a puerta", pues en ella se detallan los tipos de lavado, así como las prendas que se pueden incluir para que "no haya sorpresas".
Además, los desarrolladores exponen el deseo de fomentar y crear empleo mediante esta app, puesto que los coladers, una vez hayan superado el proceso de selección para formar parte de Colada, podrán determinar sus tarifas y gestionar su tiempo para ofrecer el servicio en los plazos que estimen. "Intentan cubrir una necesidad que a casi nadie le gusta y pensamos que estaría bien que ganasen un dinero a cambio", asegura García.
Pese a que la aplicación está dirigida a gente joven porque, según apuntan Curiel, García y Salazar comentaron el proyecto con jóvenes estudiantes y trabajadores que "rápidamente" se sintieron identificados con las dificultades a las que se enfrentan por el trabajo, también pensaron en las personas mayores. Para ellos es imprescindible que este servicio esté a su alcance con el fin de que se libren de alguna tarea del hogar. Colada se encuentra, de manera gratuita, en las plataformas Android e IOS y de momento solo está disponible en Bilbao, aunque García manifiesta su idea de que en septiembre llegue a Madrid.