La Real Sociedad se impuso este sábado al Rayo Vallecano, en partido correspondiente a la 18ª jornada de Liga. El cuadro txuri-urdin cimentó su triunfo en una primera mitad de clara superioridad, durante la que las caídas a la banda izquierda de Alexander Sorloth resultaron claves. El noruego supo aprovechar el ala que el rival desprotegía a la hora de presionar para inclinar el campo hacia Dmitirievski y permitir que los blanquiazules se marcharan al descanso con un 0-2 favorable. Este es el análisis táctico del encuentro.
Punto de partida. En teoría, así se ordenaban ambos equipos sobre el campo. Pero, a la hora de presionar a la Real, el Rayo tenía que modificar cosas para ajustarse al rombo txuri-urdin e igualar numéricamente la batalla del centro del campo.
¿Qué decidió hacer Iraola? Sin el balón, el comportamiento de su equipo tuvo dos fases. FASE 1- Presión algo menos agresiva. AMARILLO: Camello-Trejo tapan a los centrales y la línea de pase a Illarra. ROJO: Isi deja la banda y marca dentro a Marín. BLANCO: Balliu queda preparado para saltar a Rico.
En la imagen vemos un ejemplo en modo captura de pantalla de esta fase de presión rayista, algo menos atrevida que la que se aplicaba en otros lances del juego.
FASE 2- Presión más alta. Si detectaba opción clara de robo, el equipo vallecano se activaba para apretar de forma más osada aún. AMARILLO: Isi deja a Marín y pasa a emparejarse con Illarra (flecha ROJA) para que Trejo-Camello vayan con todo a por los centrales. BLANCO: Balliu se empareja con Marín.
Aquí vemos un ejemplo en captura de pantalla, en el que se aprecia arriba cómo Unai López está muy encima de Brais y Álvaro con Aritz. El Rayo se concentró en tapar en mayor medida el costado del gallego, aunque también basculó por momentos hacia el lado opuesto.
Visto el panorama, la Real lo tuvo muy claro. El Rayo desguarnecía a menudo su banda derecha, al utilizar a Balliu e Isi para presionar dentro y altos, así que Imanol se centró en buscar ese flanco. Por ejemplo, escorando a Marín, que en la imagen recibe solo.
La jugada de esta nueva imagen quedó en nada, pero sirve para explicar cómo se descompensaba el Rayo en todo su sector derecho. Es el central Lejeune quien salta a Marín, dejando tras él a Sorloth...
Y lo cierto es que el noruego, aún con el marcaje del propio Lejeune, fue el gran beneficiario de este contexto de partido. La Real se hartó de encontrarle en largo en situaciones como esta (imagen), con muchísimo espacio para correr fuera con el central, a la espalda de Balliu.
Durante la primera parte se dio una clara superioridad realista que desapareció tras el descanso. Con los minutos, la presión txuri-urdin perdió energía. La Real defendió de inicio como lo venía haciendo, manteniendo el rombo, yendo a banda con un interior y basculando con el otro.
La imagen representa un ejemplo al respecto en captura de pantalla, en una salida del Rayo por la banda izquierda con Fran García.
Dentro de este comportamiento defensivo, y ya desde el inicio de la segunda parte, la Real empezó a llegar centésimas tarde en esas basculaciones desde el lado opuesto a la jugada. En la imagen Comesaña puede jugar relativamente libre porque Brais concede unos metros preciosos.
Con lanzadores dentro disponiendo de más tiempo y más espacio, el Rayo pudo buscar en mayor medida estas diagonales largas al duelo Aritz-Álvaro que ya había explorado en la primera parte.
La reacción de Imanol ante estos problemas se dio en forma de dos vueltas de tuerca. 1- Sin hacer cambios, pasó a defender en 4-4-2 con Silva-Sorloth arriba, doble pivote Illarra-Brais y Barrene en derecha. Ayudó esperar con dos jugadores en cada banda y marcas más fijas.
Y 2- La 'tranquilidad' definitiva no se produjo con el cambio de dibujo, sino con el plus de energía que aportaron las sustituciones. En la imagen se aprecia cómo esa gasolina extra permitió presionar con el bloque mucho más alto.