Donostia – El duelo directo está servido. La Liga solo ha cumplido aún once jornadas y el momento se antoja demasiado temprano como para poner a un encuentro semejante etiqueta. Sin embargo, las vidas paralelas de Real Sociedad y Real Betis indican que el partido de esta noche en Anoeta entre txuri-urdin y verdiblancos tendrá su peso en la resolución final de la batalla europea. Durante el verano de 2020, aterrizó en el banquillo del Villamarín el técnico chileno Manuel Pellegrini. Y desde entonces el equilibrio deportivo entre ambos proyectos resulta máximo. La realidad económica de las instituciones en cuestión, mientras, presenta algunas diferencias importantes, pero esto resulta secundario ante 90 minutos de fútbol como los que aguardan hoy.
Empate a puntos
Los números llaman la atención. Tomando el mencionado fichaje de Pellegrini como punto de partida, el campeonato de Liga ha celebrado 87 jornadas, saldadas con una significativa igualada de puntos entre Real y Betis: han sumado 146 cada uno, promediando 63,7 por torneo. Gracias a estas cifras, los txuri-urdin aventajaron a los andaluces (62-61) en la campaña 2020-21, y los verdiblancos superaron a los blanquiazules (65-62) en la 2021-22, alternándose así los puestos quinto y sexto. El 22-20 actual, favorable a los de Imanol, termina de equilibrar una balanza que también alude a la Copa del Rey (un título por club estos dos últimos años) y a la Europa League (buenas fases de grupos y dificultades para avanzar en las eliminatorias posteriores).
Los jugadores de la Real se disponen a levantar la Copa del Rey en La Cartuja. | FOTO: RUBEN PLAZA
Dimensión social
No hace falta insistir desde estas líneas sobre todo lo que ha supuesto, en clave realista, la reforma del estadio de Anoeta y su posterior reinauguración completa en 2019. El nuevo recinto ha generado un ambiente que ha enganchado en Gipuzkoa y que resulta imposible disociar de los buenos resultados cosechados últimamente por la Real, naciendo a su vez una simbiosis entre club y afición que presume hoy día de una salud de hierro. Pues bien, algo similar sucede en Sevilla con la masa verdiblanca. Si Anoeta en su concepto actual vio la luz hace tres años, el Villamarín estrenó hace cinco su fondo sur. Si el feudo txuri-urdin puede albergar a 40.000 aficionados, el del Betis tiene capacidad para acoger a 60.000. Y si en las oficinas blanquiazules manejan ya lista de espera para aceptar a nuevos socios (alcanzado el tope de 37.854), en las verdiblancas sucede exactamente lo mismo (50.373). En cuestión de atmósfera, los estadios de ambos equipos son de los más calientes de la Liga, gracias a la comunión existente entre clubes, proyectos, plantillas e hinchadas.
Tamaño económico
En breve se conocerán los presupuestos desde los que Real Sociedad y Betis trabajan la actual temporada, cifras que se someterán durante las próximas semanas a la aprobación de sus accionistas. La referencia del pasado curso, con 144 millones previstos por los andaluces y 136 kilos inicialmente programados por los guipuzcoanos, hablan de dimensiones económicas muy similares. Pero escarbar un poco tras números tan generales empieza a detectar diferencias entre ambos proyectos, resultando el txuri-urdin mucho más estable en materia financiera. Así lo acredita, en cierto modo, el 134-96 que la Liga otorga de renta a la propia Real Sociedad en cuanto a límites salariales. Y así lo vienen a demostrar las palabras este pasado verano de José Miguel Lopez Catalán, vicepresidente verdiblanco: aseguró en junio que, para cuadrar balances, la entidad necesitaba vender por valor de 25 millones de euros... Más adelante vendrían las dificultades para inscribir futbolistas.
El valor de Zubieta
La cantera significa un ingrediente crucial para la mencionada estabilidad txuri-urdin. Quince de los 25 futbolistas del primer plantel de la Real pasaron previamente por el Sanse. En el vestuario del Betis, el peso de las categorías inferiores resulta muchísimo menor, con Joaquín, Loren y Rodri como principales exponentes. Cuestiones de filosofía al margen, una lista de efectivos con jugadores de la casa siempre abarata plantillas. l
Las claves
Escasez en ataque. La Real no puede contar hoy con hasta seis futbolistas susceptibles de ocupar sus tres posiciones más ofensivas (mediapunta y dos delanteros): Silva, Oyarzabal, Cho, Barrenetxea, Kubo y Sadiq. Imanol sí dispone para esas demarcaciones de Brais, Robert Navarro, Sorloth, Carlos Fernández y Karrikaburu.
Europa, reciente. Ambos equipos juegan hoy en Anoeta tras competir a domicilio el jueves en Europa y regresar de viaje el viernes: la Real, desde Chipre; el Betis, desde Bulgaria, donde ganó al Ludogorets.
Fekir, de vuelta. Cara y cruz para Pellegrini. Pierde a un jugador importante como Guido, pero apunta a dar la titularidad a Fekir tras su reaparición del pasado domingo.