donostia – La Real, y su masa social, estarán muy atentos a la reunión del LABI que tendrá lugar esta mañana y en la que se podría variar el aforo máximo del Estadio de Anoeta, que continúa siendo del 20%. Frente al Levante fueron un total de 7.758 espectadores los que se acercaron al santuario blanquiazul y pudieron disfrutar con la segunda victoria de la Real en el presente campeonato. Lo que está claro es que el equipo agradece el calor de sus aficionados. Y para muestra un botón. La Real ha ganado los últimos nueve partidos que ha jugado en casa con público. El factor desequilibrante está en casa.
La pandemia mundial sacó a los aficionados de Anoeta justo cuando la Real estaba atravesando por uno de sus mejores momentos. La última vez que se dio cita gente en el campo de Anoeta antes de que los estadios se cerrasen a cal y canto fue ante el Valladolid. La Real, ese 28 de febrero de 2020, se impuso por 1-0 al conjunto pucelano gracias al tanto de Januzaj. La última derrota jugando como local, con aficionados en las gradas, se produjo un 5 de enero, en la visita del Villarreal. Willian José adelantó a los txuri-urdin, pero Manu Trigueros y Cazorla voltearon el resultado para imponerse por 1-2. Desde entonces, la Real, con público, suma sus comparecencias caseras por victorias. Espanyol (Copa), Mallorca, Osasuna (Copa), Athletic, Mirandés (Copa), Valencia, Valladolid, Rayo y Levante han sido los convidados de piedra y se han dado cuenta de la poderosa relación existente entre la Real Sociedad y su hinchada. Que pase el siguiente.