La Real Sociedad parece haber aparcado cualquier operación que le pueda desconcentrar de su objetivo final en las tres jornadas que le quedan. Tanto las renovaciones a las que solo les queda la rúbrica de jugadores como Januzaj y Le Normand (vamos a ver si Remiro también acepta cerrar la suya antes de marcharse de vacaciones) como cualquier movimiento en la planificación de la temporada. El partido ante el Cádiz es penúltimo en casa de la temporada, ya solo quedará el del Atlético en la última etapa, y, como siempre, resulta complicado separar la actualidad con la posibilidad de que algunos jugadores enfilen la rampa de salida y no vayan a vestir más veces la txuri-urdin.
Al margen de que se pueda producir alguna marcha en forma de cuantioso traspaso de algún pilar en los esquemas de Imanol, que a día de hoy al menos parece improbable a pesar de que los entornos de Isak y de Merino auguran movimiento en torno a ellos, el foco está centrado en los que acaban contrato o en los que tienen claro que no van a seguir.
Entre los que finalizan la vinculación, destaca, por sus servicios prestados a la causa, Nacho Monreal. El club txuri-urdin todavía no ha tomado una decisión respecto al futuro del navarro, que no ha podido jugar ni un minuto esta temporada después de haber renovado el mes de marzo del año pasado por otro curso con opción del club a prolongarlo de forma unilateral. El año pasado Roberto Olabe deshojó la margarita de la continuidad de Moyá, después de pasar por el quirófano, para acabar bajando el pulgar. Habrá que ver ahora con un jugador que llegó un momento en el que estuvo cerca de entrar en la lista, pero finalmente otros problemas ajenos a la rodilla le han impedido tener minutos. Es una carpeta roja, sin duda.
Si hay un futbolista que está acabando en forma la temporada después de haber pasado inadvertido, este es Alexander Sorloth. Como informó el medio afín al club, la fecha para abonar la opción de compra ya ha pasado, por lo que la única forma de lograr su contratación definitiva es alcanzar un acuerdo con el Leipzig. Este periódico ha podido confirmar que, a pesar de que el jugador manifestó que le gustaría seguir y el propio Imanol ha reconocido que estaba contento con su rendimiento y que si fuera por él no se marcharía ninguno, todo parece indicar que no va a seguir. El Leipzig es un duro negociador y no tiene ningún problema en abrir una subasta para traspasarlo al mejor postor. En Alemania aseguran que su precio de salida está más cerca de los 20 millones que de los 15 (la opción txuri-urdin ascendía a los 16), una cantidad casi prohibitiva para la Real. Sobre todo si se tiene en cuenta que sus números han sido bastante discretos, con siete goles en total (solo tres de ellos en Liga). En su descarga cabe destacar que el inmovilismo en la pizarra de Imanol a lo largo de dos tercios de la campaña ha provocado que no encontrara hueco en el once.
Además, con la vuelta de Carlos Fernández y a la espera de la decisión que adopten con Karrikaburu (que tiene pinta de que será el 9 del filial esté donde esté), todo invita a pensar que, en el caso de que decidan ir al mercado, esta vez buscarán un perfil más rematador, ya que la fórmula escandinava de los dos puntas de perfil similar, poco matador, no ha funcionado.
Januzaj renovará por fin en breve y el club, tal y como ha manifestado desde el primer día que aterrizó en el club Jokin Aperribay, está convencido en hacer un esfuerzo para hacerse con la propiedad de Rafinha. El brasileño sigue encantado con la posibilidad de quedarse en Donostia, en una ciudad y en un equipo que no han tardado en conquistarle, pero todo se encuentra parado hasta el final de temporada. El PSG no le ha puesto precio ni le ha transmitido al jugador cuáles son sus intenciones con él por ahora.
El otro realista que finaliza contrato es el olvidado Kevin Rodrigues, que ha pasado un muy mal año en Vallecas y que tiene luz verde para buscarse la vida, ya que la Real no cuenta con él.
Una de las sorpresas entre los que tienen contrato en vigor será la marcha de Jon Guridi. "Sabía que los minutos estarían caros, sabía lo que me podía pasar, pero estar en la Real es un privilegio y no dudé mucho. ¿En invierno? Tuve la opción de salir, pero al final decidieron que me quedara aquí y he estado centrado aquí. Luego, en verano, ya se verá", declaró hace unas semanas. El azpeitiarra tiene claro que no puede pasarse otro año así, en el que solo ha participado en siete partidos, solo dos de ellos de inicio. Tiene contrato hasta 2024, por lo que habrá que ver si la Real le deja salir libre o le cede, una opción esta complicada ya que tiene 27 años. Ofertas nunca le han faltado.
Por último, Radio Marca Sevilla confirmó lo informado en su día por este periódico sobre la opción de compra obligatoria que asumía el Betis con Willian José. Finalmente, la Real ingresará algo más de ocho millones pagados en cómodos plazos.