Real Sociedad: Una recordada clasificación lograda en el estadio Diego Armando Maradona

Un gol de Willian José en el tiempo de descuento significó el empate a uno en el estadio Diego Armando Maradona, un templo con mucho significado porque el astro argentino había fallecido tan solo quince días antes, que permitió a la Real Sociedad seguir adelante en la Europa League de la campaña 2020-21 y clasificarse para los dieciseisavos de final como segundo de grupo. Pero en esta ronda se enfrentó a un potente Manchester United que le eliminó tras golearle en el destierro de Turín por el cierre de Anoeta por la pandemia (0-4).

Eso sí, entre la afición txuri-urdin se guarda el recuerdo de aquella igualada en Nápoles como uno de los grandes éxitos cosechados por la Real en Europa.

En el encuentro de la fase de grupos disputado en un Anoeta sin público en la grada por los estragos causados por el covid, la formación guipuzcoana cayó por la mínima frente al conjunto entrenado por Gattuso, que marcó por mediación de Politano. Un encuentro que dejó un mal sabor a una hinchada realista que afrontó con mucha ilusión el primer partido europeo de la temporada en casa tras ganar a domicilio al Rijeka croata (0-1).

No obstante, tras estos dos resultados, sumados a los cuatro puntos obtenidos ante el AZ Alkmaar (triunfo por 1-0 en Anoeta y empate a cero en tierras neerlandesas) y el empate en casa ante el Rijeka (2-2), la Real acudió a Nápoles jugándose la clasificación en la última jornada.

Y en el mencionado estadio Diego Armando Maradona logró un importante empate, con sabor a victoria, gracias al gol de Willian José, el más importante que marcó vistiendo la camiseta txuri-urdin, que después se marchó por la puerta de atrás.

“Vi a la Real y me volví a enamorar” fue el titular de NOTICIAS DE GIPUZKOA de aquel memorable duelo que no pudieron disfrutar los aficionados realistas por mor de la dichosa pandemia.

Y el primer párrafo de la crónica resume lo que supuso este partido para la Real: “Maradona estará orgulloso del club que estrenó la nueva denominación de San Paolo con su nombre. Pero no solo el malogrado y homenajeado astro argentino, cualquier aficionado al fútbol estaría encantado si su club jugase una décima parte de lo que lo hace esta Real. Qué maravilla de encuentro. Un baño que tenía pinta de que iba a ser estéril porque, una vez más, la falta de puntería condenaba a los blanquiazules. La diosa Fortuna decidió que lo que le había pasado a esta Real en la fase de grupos era un castigo excesivo y le echó un cable, en un balón que cayó muerto y que Willian, con una maniobra de auténtico 9, se lo acomodó para fusilar a Ospina”.