El trabajo colaborativo de la Sociedad de Ciencias Aranzadi, la Diputación Foral de Álava, el Ayuntamiento de Elciego, el Gobierno Vasco y el Fondo Social Europeo, coordinado por el especialista Gabriel García de Marcos, ha permitido restaurar un tramo de la ribera del río Ebro en el término municipal de la localidad de Rioja Alavesa. La intervención ha permitido recuperar los valores medioambientales del entorno y, además, ha servido para poner en marcha una ampliación en su zona norte para crear humedales y restituir la riqueza autóctona.
La actividad se ha desarrollado en un meandro del Ebro, donde se ha realizado un desbroce selectivo con picado del material eliminado y reparto sobre la tierra para mejorarla. Después se han eliminado árboles no autóctonos, concretamente 50 pies de falsa acacia, y posteriormente se han plantado 600 pies de variedades autóctonas, seleccionadas en viveros Eskalmendi y el vivero de la Diputación.
En el terreno había también una explotación chopera abandona, donde se han seleccionado las piezas estropeadas, secándolas con un procedimiento de anillado para mantenerlas como lugar de estancia o anidamiento de insectos, aves y fauna en general. Únicamente se han eliminado 20 chopos canadienses, todo ello bajo la supervisión del guarda forestal de la Diputación Foral de Álava.
Los resultados Tras ese trabajo, que concluyó el pasado mes de septiembre, se han logrado los resultados esperados. Según el informe de Gabriel García de Marcos, las plantaciones facilitarán el proceso de renaturalización y consolidación de especies de riberas creando parches de vegetación heterogéneos, lo que supondrá la aparición de nuevos microhábitats en un entorno muy homogeneizado. Además, la plantación de olmos resistentes a la grafiosis en este entorno puede ayudar a la dispersión de estos con el tiempo, facilitando la colonización de estas variedades en otros puntos del corredor el Ebro.
En cuanto a los trabajos de anillado, ese sistema servirá para acelerar el proceso de secado de los pies de los chopos canadienses de la antigua explotación. Esto ayudará y dinamizará la creación de refugios para quirópteros –murciélagos– y pícidos –pájaros carpinteros– en este entorno.
Finalmente, y gracias a los resultados, este proyecto ha servido como impulsor de uno de mayor envergadura, tanto en términos económicos como de conservación. Explica el coordinador que, tras haber entablado varias reuniones entre la Diputación Foral de Álava y la Confederación Hidrográfica del Ebro, ya se ha creado un proyecto para crear en la zona norte de la misma parcela, cedida por el Ayuntamiento de Elciego, un humedal y una posterior revegetación de la zona, lo que mejorará el hábitat de muchas especies típicas de ribera, muchas de ellas catalogadas, como el visón europeo, la nutria, el sapo de espuelas o los dos galápagos autóctonos.
A esta intervención va a seguir una segunda en la zona norte del meandro para crear humedales y restituir la riqueza autóctona