A Meta se le acumulan los juicios. El pasado martes, los fiscales generales de 41 estados norteamericanos más el Distrito de Columbia demandaron a la empresa matriz de Facebook, Instagram y WhatsApp bajo el argumento de que sus redes sociales son adictivas y dañinas para los niños.
Se abre así un nuevo proceso contra la compañía de Mark Zuckerberg que se suma a otros pleitos como el presentado en abril por particulares e instituciones educativas por influir negativamente en la salud de los jóvenes.
La acción lanzada de forma coordinada por esos 41 estados, 33 de ellos bajo una sola demanda conjunta, busca evitar e impedir “efectos adversos de las prácticas de la empresa” en sus respectivos territorios.
Llegan a equiparar las prácticas de Meta con las de las tabacaleras para enganchar a los más pequeños. “Como hicieron en el pasado las tabaqueras o las vapeadoras, Meta eligió maximizar sus beneficios a expensas de la salud pública, dañando específicamente a los más jóvenes”, señaló Phil Wieser, fiscal general de Colorado.
Más dura fue la fiscal general de Nueva York, Letitia James, durante su comparecencia tras presentar la demanda. Según James, Meta “se ha aprovechado del dolor de los niños” al diseñar “intencionadamente sus plataformas con características que les manipulan y les mantienen adictos a sus plataformas”.
Desde Meta, un portavoz lamentó que la demanda se dirija solo a ellos y no al resto de redes sociales, y criticó que los estados demandantes eligieran la vía judicial en lugar de “trabajar productivamente con la industria para crear estándares de uso para las aplicaciones de los menores”.