pendiente del calor, que obligó a hacer alguna adaptación, la tamborrada anunció ayer los sanjuanes de arrasate
Los sanjuanes más esperados ya están aquí. Dos años enmudecidos, ayer retumbaron por todo lo alto. Numerosos niños y niñas atronaron las calles de Arrasate con sus tambores, dejando sentir los primeros compases de la fiesta que estallará de lleno el próximo jueves. Con desparpajo e ilusión los txikis cumplieron con su misión de poner la nota de color a la antesala festiva. Fue una tamborrada de estrenos. Lució renovada gracias a los 60 trajes firmados por la diseñadora arrasatearra Amaia Albes, que tuvieron su puesta de largo en dos compañías de barrileros y barrileras, así como en la vestimenta del general y las tres abanderadas, que ayer tuvieron que desfilar a pie.
Y es que también hubo que tomar decisiones sobre la marcha. El calor extremo con el que amaneció la jornada obligó a hacer algunas adaptaciones, entre ellas, la ausencia de los cuatro caballos que abren la marcha. Una vez iniciado el desfile, con las temperaturas más suavizadas, una tímida lluvia provocó alguna que otra carrera y parada en el camino hasta la Herriko plaza.
El protagonismo infantil continúa hoy con otro clásico. El Haur Dantzarien Eguna se celebra con una versión muy de la de casa: con la participación única de dantzaris de Txikitxu-Arrotaitz y Lore Gazteak. De ahí a que la fiesta se haya rebautizado como Arrasateko Dantzari Eguna. l