"La economía del futuro o es verde o no será". Así de contundente se mostró la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, ayer en Donostia, donde se marcaron los objetivos de reducir un 45 % la emisión de gases de efecto invernadero para 2030 y "descarbonizar" la economía vasca en 2050.
Tapia envió este mensaje durante un acto celebrado en la capital guipuzcoana para presentar las conclusiones preliminares de un trabajo participativo previo a la elaboración del quinto Programa Marco Ambiental de Euskadi 2030, con motivo de la celebración hoy del Día Mundial del Medio Ambiente.
Durante su intervención, la consejera recordó la "larga trayectoria" desarrollada en materia ambiental por Euskadi, con varios "instrumentos" recientemente aprobados, como el Plan de Prevención y Gestión de Residuos, el Plan de Economía Circular y Bioeconomía, y el Programa de Compra Verde, además de la futura Ley de Transición Energética y Cambio Climático que aún se encuentra en tramitación.
Un contexto en el que, según anunció, ahora el nuevo Programa Marco Ambiental de Euskadi 2030 permitirá seguir avanzando "hacia un modelo de desarrollo justo y sostenible", que el Gobierno vasco impulsa a través del Pacto Verde de Euskadi, en línea con el European Green Deal. Este modelo, como comentó, se puede calificar de "verde", pero atiende también a la necesidad del desarrollo económico, con su correspondiente generación de economía y de empleo.
Lakua afirmó del mismo modo que el Plan de fomento de la producción ecológica de la CAV en vigor tiene entre sus objetivos incrementar un 10% anual el número de operadores y transformadores ecológicos en Euskadi e incrementar un 1% la superficie agrícola útil de cultivos extensivos, vitivinícola y frutales en agricultura ecológica. La superficie agrícola dedicada a la producción ecológica es de 5.700 hectáreas en Euskadi y el número de operadores ecológicos en la CAV ha aumentado respecto a 2015 de 389 a 707.