El uso de vehículos menos contaminantes y menos ruidosos, en definitiva más sostenibles, va dejándose notar cada vez más, en la distribución logística de las mercancías de nuestros pueblos y ciudades... En el caso de Bilbao, el área de movilidad da un paso más en este sentido, y va a probar de forma piloto, en el Casco Viejo, el reparto de última milla con motocarros eléctricos, es decir, el último trayecto entre el almacén y el cliente final, los hosteleros.
Se trata de una prueba de reparto sostenible, que se va a poner en marcha en el Casco Viejo, en este espacio declarado recientemente "Zona de Preferencial Peatonal".
Para ello, el Ayuntamiento y la compañía Heineken, junto a su socio en la distribución Euskodis, desplegarán este sistema de logística sostenible de última milla cero emisiones netas, con 2 vehículos eléctricos, que hoy han sido presentados y que recorrerán las calles del Casco Viejo, tras hacer la carga en una lonja del Mercado de La Ribera.
De esta forma cada día dos motocarros, o scooter a los que se ha añadido una especie de remolque, van a circular por las calles del Casco Viejo evitando el empleo de camiones grandes que son mucho más ruidosos para alivio de los vecinos y vecinas de "Las 7 calles", además de menos contaminantes. Tampoco habrá que ver a los repartidores carretilla en mano con los pesados bidones de cerveza, porque estos vehículos al ser más pequeños se puedan aparcar con más facilidad en las calles estrechas
Reparto a más de 200 puntos de venta hosteleros
En total, más de 200 puntos de venta hosteleros serán abastecidos de esta forma y se beneficiarán de este pionero reparto con el que se prevé evitar la emisión a la atmósfera de 1.650 kilos de CO₂ al año en la ciudad.
La Concejala de Movilidad y Sostenibilidad, Nora Abete, ha asegurado que "nos hemos puesto a trabajar para facilitar y mejorar los procesos de carga y descarga en Bilbao, y hacerlo de una forma sostenible, como es este caso. Porque nuestro objetivo es conseguir que nuestra ciudad sea más verde, más accesible y más respetuosa con el medio ambiente. Una ciudad más vivible".
Por su parte, Pablo Mazo, Director de Relaciones Institucionales Heineken España, ha explicado que "estamos colaborando activamente para que nuestras ciudades sean más sostenibles. Nos hemos convertido en pioneros en el reparto de última milla a la hostelería con nuestro proyecto de logística cero emisiones netas."
El reparto se realiza con vehículos eléctricos diseñados por la start-up andaluza Scoobic, que realizan la entrega por las calles del Casco Viejo, después de haber establecido el punto de "Ruptura de Carga" en el Mercado de la Ribera.
Gracias a sus menores dimensiones y peso, estos pueden circular por el casco antiguo de cualquier ciudad integrándose en el entorno y respetando a vecinos y turistas, además de descongestionar el tráfico, reducir la contaminación visual y acústica, y cuidar el patrimonio cultural, especialmente valioso en ciudades como Bilbao.
Actualmente esta forma de distribución está implantada con éxito en Sevilla y Málaga y se están llevando a cabo pilotos en ciudades como Madrid, Ciudad Real o localizaciones en Cataluña como Sitges o Port Aventura, entre otras.
Heineken quiere alcanzar la neutralidad en carbono en 2040.