El enlace de la autovía A-1 con la autopista AP-1 en Armiñón (Álava), sentido Burgos, vuelve a convertirse esta mañana en un punto de retenciones debido a la operación salida de verano, como suele ser habitual.
En torno a las 10.00 horas de la mañana se registran retenciones de alrededor de cuatro kilómetros debido a una gran afluencia de vehículos que se dirigen hacia el sur del terrritorio.
Según ha informado el Departamento vasco de Seguridad, en el resto de carreteras vascas la normalidad es la nota predominante, localizándose tan solo retenciones de cuatro kilómetros en el enlace de la A-1 en Armiñón, y algunas retenciones en el enlace de la N-622 con la A-1 en Vitoria, sentido Madrid.