MARI Carmen Valente es barraquera de las de toda la vida. Su familia y ella son propietarias del tiovivo que se suele situar en el parque Etxebarria los días de Aste Nagusia, aunque esta vez no le ha quedado más remedio que trasladarlo a la Plaza Indautxu, donde decenas de niños aguardaban la cola impacientes para montarse en el tiovivo de Valente. Mari Carmen pertenece a la tercera generación de barraqueros de su familia y la cuarta, aseguró, "está de camino".
Rondaban las 18.00 horas de la tarde y ayer fue el primer día, después de tanto tiempo, en el que regresaron las barracas, aunque esta vez distribuidas en diferentes distritos de Bilbao. La Plaza Indautxu se encontraba llena de madres, padres y abuelos acompañando a los más pequeños de la casa para que se divirtiesen. Unos comían churros y otros esperaban largas colas, no había muchas barracas, tan solo tres, pero bastaban para sacar una sonrisa a las familias.
La pandemia no ha supuesto nada positivo, lo han notado en especial los barraqueros que, como Valente, viven de las ferias y son su vida. Lo que pide la feriante es poder trabajar: "Hacerlo aunque sea por distritos es un alivio; queremos trabajar, ya sea separados o con todas las medidas que nos exigen".
Aunque confesó que el traslado de las atracciones a diferentes distritos le parece "más o menos" una buena idea: "Me parece mal porque todos los barraqueros se encuentran muy repartidos y creo que se debería separar en concreto las barracas más pequeñas. Además, quieras o no la gente se divertía mucho con más atracciones".
Las ganas de feria estuvieron muy presentes el primer día en Indautxu, sobre todo por parte de los más pequeños, ejemplo de ello es la hija de Gorane López. Vecinas de Indautxu, acudieron a la feria porque su pequeña no quería perderse la cita: "Tenemos pensado ir al tiovivo, a las colchonetas giratorias y luego a la noria".
felicidad
La primera vez que se enteraron ella y su hija de que las barracas regresarían después de haber estado tanto tiempo sin ellas se sintieron muy felices: "Para los pequeños esto es la bomba". Pero la felicidad para ella debe estar acompañada de seguridad, por eso cree que separar las barracas por distritos es una buena idea, ya que así todos los vecinos pueden disfrutar de ellas sin que haya aglomeraciones". Lo mismo opina otra de las vecinas de la zona que, al igual que Gorane López, acudió a la plaza a disfrutar con su hija, ya que esta se quedó sin vacaciones de verano porque se contagió de covid-19: "Mejor que las barracas se separen a que esté todo centralizado", consideraba.
Vivir lo vivido
Pero el vecino Leonardo Molina discrepaba, pues le parece ilógico que las barracas se separen por distritos porque "va a haber aglomeraciones igualmente estén todas juntas como siempre o estén separadas". Molina acudió a la feria con intención de que su hijo disfrutase de todas las barracas ya que llevaba tiempo sin poder montarse en ellas. Y así fue: se montó en las tres que acoge la Plaza Indautxu. "Todos los días hacíamos planes parecidos con el pequeño, como ir al parque, así que sentí mucha alegría cuando vi que regresaban", añadió.
Sin embargo, las cosas este año no son lo que eran y la añoranza por la Aste Nagusia de toda la vida perdura, y así lo demostró López, que confesó echar de menos las "fiestas en sí", y Molina, que añora los conciertos y el ambiente. Incluso la barraquera Mari Carmen Valente expresó que echa de menos el "estar todos juntos, los fuegos artificiales y Marijaia".
Pero hay otros, como la vecina de Indautxu, que prefieren esperar un poco más para que Aste Nagusia regrese: "No echamos en falta nada de las fiestas porque entiendo que ahora mismo es lo que hay".
Los bilbainos han demostrado que las fiestas de toda la vida son una tradición que, da igual el tiempo que pase, las volverán a vivir con las mismas ganas. Ellos no olvidan a Marijaia, pero la gran dama de Aste Nagusia tampoco los olvida a ellos y cuando acabe la pandemia volverá con más ganas de recibirlos a todos que nunca.
EMPLAZAMIENTOS PREVISTOS
"El poder trabajar aunque sea por distritos es un alivio. Lo que pedimos es trabajar"
MARI CARMEN VALENTE
Barraquera
"Dividir las barracas por distritos es ilógico porque habrá aglomeraciones igualmente"
LEONARDO MOLINA
Padre
"Lo que echamos en falta de las fiestas de toda la vida son las fiestas en sí"
GORANE LÓPEZ
Madre