El club y la localidad calientan motores cargados de ilusión. Barakaldo se apresta para vivir este sábado (18 horas) el choque de vuelta de la primera de las dos eliminatorias de ascenso a la Primera RFEF. Aguarda el Atlético Paso tras el 0-0 de la ida durante la mañana del pasado domingo en la canaria isla de La Palma.
El equipo que dirige Imanol de la Sota dio el primer paso hacia la segunda y definitiva ronda de este play-off aunque pudo cosechar un mejor resultado de no mediar el penalti que, lanzado por Julen Huidobro, fue adivinado por el meta local Loscos. Aún así, se regresó de feudo insular con saldo positivo. "No perder el primer partido fuera ya es importante. Va a ser un partido duro y cerrado porque tienen un gran equipo veterano que va a saber jugar este play-off. No nos fiamos mucho de lo poco que han sacado jugando fuera, es un equipo muy fiable con gente de la península con experiencia en Segunda B y que tienen buenos curriculums", comenta en ONDA VASCA el presidente del Barakaldo CF, Ricardo Arana.
"Es verdad que el 0-1 nos hubiera venido de perlas pero estamos contentos con el resultado", asegura Arana de cara al definitivo asalto de vuelta contra el quinto clasificado del grupo 5 de la Segunda RFEF. La experiencia en la isla resultó, en lo extradeportivo altamente satisfactoria, ya que fueron "`superhospitalarios'. Solo tenemos que agradecerles a la directiva y al pueblo de El Paso. El trato fue excepcional".
Y en lo puramente futbolístico, en el Consejo de Administración de la entidad fabril se confía plenamente en las prestaciones de este plantel por alcanzar un segundo ascenso consecutivo tras cuajar dos años memorables. "En Lasesarre no vamos a tener excusas, tenemos el campo muy bien pero hay un gran rival y le tenemos mucho respeto". Y no parece que se vaya a especular con que dos de los tres resultados posibles valen, todo menos perder, porque este equipo siempre "sale a por el partido, incluso el otro día, y no creo que cambie", concluye Ricardo Arana en 'La Movida Deportiva' dirigida por José Manuel Monje.