El estand de la empresa alavesa Zayer en la Bienal de Máquina- Herramienta ha estado dominado por una gigantesca máquina de alta velocidad que ha funcionado de manera continua ante la mirada expectante de los asistentes. "Una vez acabada la feria la enviaremos al cliente, el grupo Volkswagen en Barcelona", dice Ricardo Diego, director comercial de la firma ubicada en el barrio de Betoño en Gasteiz y que cuenta con 150 empleados. Este diseño les ha permitido ganar uno de los Premios a la Innovación en la BIEMH.
Fabricante de fresadoras y centros de mecanizado desde 1957, desde Zayer hacen un balance provechoso de la Bienal, que confirma las "buenas" expectativas acumuladas en los dos últimos años. "Había bastantes ganas de feria. El contacto directo con los clientes es el valor diferencial de la Bienal. Aunque de forma telemática también ha sido posible mantener las relaciones, preferimos el cara a cara", expone Diego, para quien "el sector de la máquina-herramienta se está defendiendo bien" de una pandemia "que nadie esperaba que durase tanto" y de una guerra que "nos afecta a todos, directa o indirectamente". Las dificultades están presentes, pero el optimismo también. "Hay un gran incremento de costes y la entrega de materiales también se está complicando, lo que está produciendo una situación muy estresante para los fabricantes, pero seguimos recibiendo pedidos, los proyectos no se están cancelando y los clientes siguen invirtiendo", concluye el responsable.