La llegada de Rober González a Mendizorroza durante el último día del mercado de fichajes generó, en primera instancia, muchas dudas. La afición babazorra demandaba un atacante contrastado, con suma facilidad para marcar goles, y lo que recibió fue todo lo contrario: una joven promesa que, pese a haber podido debutar con el primer equipo del Real Betis, solo contaba con una temporada y media de experiencia en el fútbol profesional, lo cual, eso sí, ya era bastante más que muchos otros.
No obstante, en apenas tres apariciones como revulsivo, el futbolista extremeño ya ha demostrado tener cualidades para, siempre que Luis García Plaza siga contando con él, aportar mucho a la escuadra babazorra. Tanto por su talento en la parcela ofensiva, donde es capaz de destacar, corroborando lo que él mismo admitió en su presentación, mediante su “verticalidad” y “descaro”, como por su amplia polivalencia sobre el césped, pues puede jugar en ambas bandas, como delantero y, en especial, detrás de este.
En el Cartagonova, sin ir más lejos, su entrada al terreno de juego tras el paso por los vestuarios, cuando sustituyó al magullado Abde Rebbach, fue determinante. Más allá de asistir, con un bonito pase por alto, a Miguel De la Fuente en el gol del empate, Rober se encargó, a lo largo de toda la segunda mitad, de generar espacios a sus compañeros y, junto a sus arrancadas, provocar dudas en la zaga albinegra, la cual, hasta su incorporación, se había sentido excesivamente cómoda.
Unos detalles de atacante muy móvil, diferente al rol que pueden cumplir otros compañeros, que encajó bien con las maniobras de Xeber Alkain, también decisivo en las transiciones ofensivas, y que los seguidores del Glorioso ya habían podido observar previamente. En concreto, durante su debut como albiazul frente a la UD Las Palmas, a quien estuvo a punto de amargarle la visita a Mendizorroza con un potente remate en los últimos compases del encuentro.
Estas dos actuaciones, porque en el Anxo Carro no pudo participar demasiado, son buena muestra de lo importante que puede llegar a ser Rober para Luis García; sobre todo, si continúa sumando minutos y confianza. La Segunda División, en referencia a lo que tantas veces repite el técnico madrileño, es muy larga y, por ende, todo futbolista que esté dispuesto a aportar va a ser importante, más aún si, además de esfuerzo, también se tiene talento, como es el caso del atacante cedido por el Real Betis.