Se puede decir que cada día está dedicado a alguien o algo: a la Madre, al Niño, al Medio Ambiente, a la fresa, al perro... Y casi cada profesión también tiene una jornada especial. Así que no puede faltar el Día Internacional del Inventor, el 9 de noviembre. Y para celebrarlo, qué mejor que recordar inventos tecnológicos aparecidos en el cine mucho antes de que pudiésemos ni siquiera imaginar tenerlos en la vida real.
La ciencia ficción es un género especulativo que relata acontecimientos posibles desarrollados en un marco imaginario que puede ser el pasado, presente o futuro, e implica muchas posibilidades como mundos apocalípticos, la vida en otros planetas, la evolución humana... Es muy común en el mundo cinematográfico y gracias a este género, ahora tenemos dispositivos que antes solo veíamos en las pantallas.
Robots y drones
En la actualidad es posible ver robots que hacen las funciones de camarero, asistente o recepcionista, por ejemplo. Y fue en la Exposición Universal entre 1939 y 1940 cuando se presentó físicamente el primer robot humanoide llamado Elektro, de dos metros que podía caminar y contaba con una grabación de 700 palabras para poder simular una conversación.
Sin embargo, fue en la película Metrópolis, de Fritz Lang (1927) donde se vio ya este prototipo que quería servir para sustituir a los trabajadores de las fábricas. También se experimenta con la inteligencia artificial, al igual que ocurrió en 2001: A Space Odyssey, de Stanley Kubrick (1968).
Más famoso es RoboCop (1987), un cíborg policía. Se pueden considerar similares los robots policía que patrullan el aeropuerto de Changi, en Singapur, junto a los agentes. En caso de que haya algún incidente, pueden avisar a los transeúntes y acordonar la zona.
Y tres años antes se estrenó Terminator, pionera en el campo de la robótica, ya que las máquinas tienen conciencia sobre sí mismas. Además, surgen los drones militares, muy utilizados en las misiones actuales de los ejércitos.
Telecomunicaciones y gadgets
Si el teléfono fue un invento revolucionario, un dispositivo con el que poder llamar y ver a la otra persona resultó de lo más sorprendente en la década de los 60. En el film ya mencionado de Stanley Kubrick se puede ver cómo desde la nave, el protagonista mantiene una videollamada con su hija gracias al Picturephone. Sin embargo, este aparato ya existía y se anunciaba en Estados Unidos como “Un tour de force tecnológico, este teléfono te permite ver así como escuchar”. Se trata de un invento de los Laboratorios Bell que aprovecharon la película para darlo a conocer en el mundo entero.
También las videollamadas y el adelanto de las redes sociales se ven en Regreso al Futuro 2 (1989) cuando la versión del futuro del protagonista, Marty McFly, habla con Douglas Needles. En esta película aparecen más gadgets que ahora no nos resultan extraños, como unas gafas multiusos que sirven para contestar llamadas, ver la televisión o como reloj, al estilo de las Google Glass.
Incluso la identificación utilizando datos biométricos se adelantó en esta segunda entrega de la trilogía, en la que Marty, cuando viaja a 2015, llega a su casa cuya puerta principal dispone de un escáner para los ojos y de un sistema de apertura mediante huella dactilar, algo que se utiliza actualmente en la mayoría de los smartphones, por ejemplo.
Menos conocida es Hackers: piratas informáticos (1995), pero en ella se descubre lo que son hoy en día los dispositivos de realidad virtual. A mediados de la década de los 90, cuando internet no estaba tan generalizado como ahora, un adolescente se sumerge en esta obra en mundos de realidad virtual que posteriormente se han desarrollado para sectores como los videojuegos o el turismo.
Los Supersónicos
El cine sirve en ocasiones como una feria de inventos tecnológicos, pero también las series de televisión. Mención especial merece Star Trek, en la que en plena década de los años 60 ya se mostraron dispositivos al estilo de las tablets, teléfonos plegables y un aparato similar a las actuales impresoras 3D (los denominados en la serie “replicadores”).
Y también hay que destacar la serie de dibujos de la misma época Los Supersónicos. En ella la domótica es lo habitual en todos los hogares, al igual que los asistentes de voz; y gadgets como relojes inteligentes los llevan incluso los niños. También aparecen los robots aspiradora, las cintas transportadoras que existen en todos los aeropuertos de la actualidad e incluso un simulador para probar ropa.