Rural Kutxa obtuvo en 2023 un beneficio de 190,8 millones de euros, un 65,6% más que el ejercicio anterior, dinero que destinará en su mayor parte a incrementar sus reservas. Esto elevará su patrimonio neto hasta 1.772 millones de euros, un 17,6% más que en 2022.
La entidad ha explicado en un comunicado que estos beneficios son resultado de las subidas de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE) en su lucha contra la inflación y de una adecuada gestión de la morosidad.
“Estas circunstancias, en parte de carácter extraordinario, han posibilitado obtener un margen de intereses de 226 millones y un margen bruto de 353,6 millones, un 38,5% más que el año anterior. Con lo que el resultado del ejercicio ha sido de 190,8 millones de euros, un 65,6% más que el ejercicio anterior”, indica Rural Kutxa.
De esta forma, la entidad refuerza su solidez y genera los recursos que considera necesarios para seguir creciendo en el futuro.
Solvencia, morosidad y RSC
La solvencia de Rural Kutxa en términos de Capital Ordinario de nivel 1 (CET 1), que refleja el nivel de recursos propios de primera categoría, se sitúa en el 24,16%, superior en 3,81 puntos al año anterior, lo que le sitúa como uno de los más elevados del sector financiero español, asegura.
Actualmente, la entidad gestiona 12.146 millones de euros en depósitos de clientes del sector privado, un 10,85% más que el año anterior, destacando el notable incremento en el apartado de imposiciones a plazo fijo, “al ser una de las primeras entidades en beneficiar a sus clientes con la remuneración de sus ahorros”.
Respecto a la morosidad, al cierre de 2023 se situó en el 2,03%, similar a la del año anterior, y "muy inferior a la tasa de morosidad a nivel nacional", que alcanzó el 3,7%, según los últimos datos publicados.
Por otro lado, Rural Kutxa incide en que continúa su apuesta por la financiación de "actividades con alto impacto positivo", tales como la construcción y renovación energética de edificios, las energías limpias, la vivienda social, la agricultura sostenible o las distintas líneas de financiación a Pymes para mantener el empleo y acompañar la actividad económica del entorno.