Rusia ha tildado este jueves de "ridículas" las declaraciones de Ucrania desvinculándose del ataque con drones ejecutado el miércoles contra el Kremlin, que Moscú ha descrito como un intento de asesinato contra el presidente, Vladimir Putin, al tiempo que ha señalado que la orden habría sido dada por las autoridades de Estados Unidos.
"Estas decisiones, la definición de objetivos y medios, todo es dictado a Kiev desde Washington. Somos muy conscientes de ello", ha dicho el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, que ha recalcado que los sistemas de defensa antiaérea serán "reforzados" en la zona, según ha recogido el diario ruso 'Izvestia'.
"Todo será reforzado", ha dicho, al tiempo que ha recalcado que Putin "mantuvo la calma" durante el suceso. "En momentos difíciles y en situaciones extremas, el presidente siempre mantiene la calma, es claro en sus valoraciones y en las órdenes que da", ha destacado, antes de incidir en que en este caso "no pasó nada nuevo".
Asimismo, ha manifestado que el desfile por el Día de la Victoria, previsto para el 9 de mayo, tendrá lugar en la Plaza roja de Moscú, "sin cambios en los planes", antes de manifestado que no hay prevista una reunión del Consejo de Seguridad Nacional de Rusia para abordar el ataque con drones, que se saldó sin víctimas.
Peskov ha recalcado además que la respuesta de Moscú a este incidente tendrá lugar "de forma equilibrada" y "en línea con los intereses del país", después de que el Kremlin afirmara el miércoles tras el suceso que "Rusia se reserva el derecho de adoptar medidas en respuesta donde y cuando considere apropiado".
En esta línea, el Ministerio de Exteriores ruso ha condenado "firmemente" el "acto terrorista" contra el Kremlin y ha reseñado que "no hay duda de que el régimen de Kiev está detrás". Así, ha dicho que Ucrania "ha apoyado desde hace mucho métodos terroristas contra infraestructura civil y población civil", antes de recordar el ataque en octubre de 2022 contra el puente de Kerch, que conecta Rusia con la península de Crimea, ocupada en 2014.
"Atacaron el puente de Crimea el 8 de octubre de 2022, ha habido ataques contra objetivos no militares en las regiones de Briansk, Belgorod y Rostov, múltiples sabotajes y ahora Moscú. Las actividades terroristas y de sabotaje de las Fuerzas Armadas de Ucrania están ganando un impulso sin precedentes", ha dicho a través de un comunicado publicado en su página web.
El Ministerio de Exteriores ruso ha aseverado que "la gravedad de este crimen aumenta por el hecho de que el Kremlin es la residencia del jefe de Estado". "El especial cinismo de las acciones de las autoridades neonazis ucranianas se fundamenta en que el intento de asesinar al presidente de Rusia tuvo lugar antes del Día de la Victoria", ha subrayado.
"Estos crímenes no quedarán sin respuesta", ha recalcado en su comunicado, en el que ha garantizado que los responsables del suceso "serán localizados". "Les espera un castigo duro e inevitable", ha dicho, al tiempo que ha apuntado que "las acciones criminales del régimen de Kiev demuestran de nuevo su falta de voluntad para la paz y para solucionar el conflicto a través de medios políticos y diplomáticos".
"La necesidad de alcanzar todos los objetivos de nuestra operación militar especial es obvia. Las amenazas a la seguridad y los actos de terrorismo no deben emanar del territorio de Ucrania", ha dicho el ministerio, que ha denunciado que "el régimen de Kiev es apoyado por países occidentales que le entregan armas, información de Inteligencia, entrenan a sus milicianos y les dicen cuáles son los objetivos".
Por ello, ha argüido que "el silencio de Occidente demuestra su indulgencia ante los métodos terroristas del régimen neonazi y extremista en Kiev", antes de exigir que "se fuerce" a Ucrania a "cumplir sus obligaciones en el campo de la lucha contra el terrorismo. "Rusia se reserva el derecho a adoptar medidas de respuesta (...) y actuará una vez se valore la amenaza que Kiev ha creado a la cúpula del país", ha zanjado.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, negó el miércoles que Kiev esté detrás del suceso. "No estamos atacando a Putin ni a Moscú. Estamos luchando en nuestro propio territorio y defendiendo nuestros pueblos y ciudades", manifestó el mandatario, quien abogó por dejar este asunto en manos de tribunal internacional, que esperan que investigue crímenes en el marco de la guerra en Ucrania.