La cámara baja de la Asamblea Federal de Rusia está estudiando la posibilidad de ilegalizar las actividades de la fundación dirigida por el actor estadounidense George Clooney y su mujer, la abogada Amal Clooney, después de que una de sus trabajadoras recomendara la detención de periodistas rusos por hacer propaganda del Kremlin.
El presidente de la comisión de la Duma sobre injerencias extranjeras, Vasili Piskarev, ha anunciado que los diputados considerarán la posibilidad de reconocer como "indeseables en la Federación Rusa las actividades de la Fundación Clooney y sus seguidores".
Esta declaración tiene lugar después de que la directora de uno de los proyectos de la Fundación, Anna Neistat, llamara a acciones legales contra periodistas rusos considerados como responsables de hacer propaganda estatal, según hizo saber en una entrevista con la emisora internacional estadounidense Voice of America.
Neistat llegó incluso a proponer la posibilidad de designar a estos periodistas como "cómplices de la incitación al genocidio" tomando el ejemplo de la Radio de las Mil Colinas que alimentó el genocidio en Ruanda aunque "una forma más práctica sería la de presentar cargos de propaganda de guerra, un delito que todavía está presente en los códigos penales de varios países europeos".
En respuesta, Piskaev ha asegurado en el canal de Telegram de su comisión que "las viles acciones de esta ONG estadounidense contra nuestros periodistas no quedarán sin respuesta".
También ha respondido el expresidente ruso Dimitri Medvedev a través de un mensaje en su cuenta de la red social X en la que denuncia que "cierto actor mediocre llamado George Clooney ha decidido utilizar su Fundación para cazar a periodistas rusos por todo el mundo y perseguirlos".
"Pero el esfuerzo sería en vano: nuestros periodistas profesionales lo encontrarán primero. Son personas muy atentas y muy capacitadas. Y van a charlar con él, abiertos hasta el amanecer", ha declarado Medvedev en referencia a una de las películas del actor.