El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha confirmado este jueves que la baloncestista Brittney Griner, liberada en Rusia en un intercambio de presos, está "a salvo" y en un avión de vuelta a EE.UU. "Está a salvo, está en un avión. Viene de vuelta a casa", dijo Biden en un mensaje en Twitter en el que confirmó también que ha hablado con ella.
Con estas mismas palabras comenzó Biden su comparecencia en la Casa Blanca junto a la vicepresidenta, Kamala Harris, y la esposa de la deportista, Cherelle Griner.
El mandatario explicó que Griner, que se encuentra con "buen ánimo", ha sido liberada -intercambiada por un preso ruso, Víctor Bout, un traficante de armas- tras unas "intensas" negociaciones y después de que fuera condenada en agosto pasado por un juicio "teatral" e injusto.
Biden también quiso recordar a otros estadounidenses que han sido tomados como "rehenes" y detenidos "arbitrariamente" en Rusia o en otros países, y aseguró que son una "prioridad" para su administración.
Lamentó en este sentido que Estados Unidos no haya podido liberar aún a otro preso estadounidense, Paul Whelan, cuyo caso "lamentablemente" y por "razones totalmente ilegítimas" Rusia ha tratado de forma distinta al de Griner.
Condenada a nueve años de prisión
Griner fue condenada en agosto de este año a nueve años de cárcel en Rusia por cargos de posesión y contrabando de drogas, mientras Bout, conocido como el "mercader de la muerte", cumplía una condena de veinticinco años de cárcel en Estados Unidos.
La deportista, estrella del WNBA, de 32 años, fue condenada el pasado 4 agosto pasado a nueve años prisión tras ser declarada culpable de los delitos estipulado por los artículos 228 y 229.1 del código penal ruso (tenencia y tráfico de drogas).
Griner, que fue detenida en febrero de este año en un aeropuerto de Moscú con aceite de cannabis entre sus pertenencias, aceptó su culpabilidad y pidió clemencia, solicitud desestimada por el tribunal.