El Tribunal Supremo de Rusia ha reconocido este martes al ucraniano Batallón Azov, de corte ultranacionalista y con vínculos neonazis, como organización terrorista, por lo que sus actividades quedan completamente prohibidas en territorio ruso.
"Reconocemos a la asociación nacionalista paramilitar Azov como organización terrorista y prohibimos sus actividades en Rusia", ha indicado la corte en un comunicado en el que ha señalado que la decisión entra en vigor de forma "inmediata".
Además, la resolución, emitida a instancias de la Fiscalía General, implica el endurecimiento de las penas para los miembros del Batallón Azov. La vista judicial contra la unidad ha tenido lugar en gran medida a puerta cerrada debido a que los materiales presentados están clasificados como secretos.
La corte considera que la ideología del batallón incluye elementos de "racismo biológico extremo", planes de segregación racial en el ámbito jurídico, rechazo a la democracia, la moral y el Derecho Internacional.
Asimismo, han acusado a sus miembros de atacar a representantes de etnias minoritarias y oponentes políticos, intimidar a la comunidad rusoparlante de Ucrania, llevar a cabo secuestros y recurrir a la tortura, especialmente en la región de Donbás, en el este del país.
Las fuerzas rusas consideran que el batallón está detrás de numerosos crímenes de guerra, incluidos bombardeos contra zonas residenciales, torturas y asesinatos de civiles. La decisión responde a una demanda presentada a principios de este año por la Fiscalía, según informaciones de la agencia de noticias Interfax.
Actualmente, el Comité de Investigación de Rusia se encuentra investigando una serie de presuntos casos contra miembros del batallón por su posible implicación en el asesinato de civiles en el Donbás.
Respuesta del Batallón Azov
Por su parte, el Batallón Azov ha publicado un mensaje en su canal de Telegram donde ha criticado que Rusia esté tratando de buscar "nuevas excusas y explicaciones" para justificar sus "crímenes de guerra" por los que, dicen, Moscú debe ser castigada "de una vez por todas".
Es por esto que el grupo ha hecho un llamamiento al Departamento de Estado de Estados Unidos y a organismos autorizados de otros países para que "reconozcan a la Federación Rusa como un Estado terrorista".
Para el Batallón Azov, el Ejército ruso y sus servicios especiales "cometen crímenes de guerra todos los días". "La aquiescencia a estos crímenes o el silencio es complicidad (...) El mundo entero debe unirse contra el Estado terrorista", han advertido.