El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha defendido este viernes que la "operación especial" librada en Ucrania avanza "según lo planeado" después de que el presidente bielorruso, Alexander Lukashenko señalara que "no esperaba" que la invasión "se prolongara tanto tiempo".
El miércoles, Lukashenko señaló, no obstante, que no se encuentra "tan inmerso en el problema como para opinar" al respecto, si bien matizó que consideraba que la "operación se está alargando". "Es mi punto de vista, pero está basado únicamente en los hechos que tengo a mi disposición", aseguró entonces, según informaciones de la agencia de noticias Interfax.
Este mismo jueves, el subdirector del Departamento de Información del Ministerio de Exteriores ruso, Alexei Zaitsev, ha manifestado que las negociaciones entre Rusia y Ucrania "se encuentran estancadas".
Así, ha recalcado que los comentarios de los "políticos ucranianos muestran elocuentemente la falta de disposición para seguir en la mesa de negociación" y ha recordado que esta semana el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, afirmó que "no veía futuro" a las conversaciones.
Polonia es una "fuente de amenaza"
Polonia es una fuente de amenaza para la integridad territorial de Ucrania, declaró este viernes el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, al ser preguntado en torno a las supuestas pretensiones de Varsovia sobre territorios del oeste de Ucrania.
"En los últimos meses se oye una retórica muy hostil de Polonia, que tradicionalmente no ha sido amistosa", dijo Peskov en rueda de prensa. El portavoz agregó que es un "hecho evidente" que desde Polonia puede emanar una amenaza a la integridad territorial de Ucrania.
Al mismo tiempo, Peskov se negó a comentar las declaraciones del presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko, acerca de que Rusia, Ucrania y Bielorrusia, tarde o temprano, podrían verse obligadas a luchar juntas contra Polonia, que desea controlar el oeste de Ucrania.