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Política

Ruth Doval: “Las víctimas no han sido tratadas con la deferencia que merecían”

ETA asesinó a su padre, profesor de Derecho de la UPV/EHU y miembro de UCD, en Donostia en octubre de 1980
Ruth Doval
Ruth Doval

En su caso, sí que hubo un juicio por el asesinato de su padre, aunque los procesados no fueron condenados por ello.

—Sí. Hubo un juicio con tres acusados, lo que pasa es que salieron absueltos por falta de pruebas. Uno de ellos sí fue condenado por pertenencia a banda armada, pero en el año 91 fue indultado. Pero a mí, personalmente, el hecho de que haya o no gente condenada por ello en la cárcel tampoco me hubiera reconfortado demasiado. El destrozo te lo hacen cuando te matan a tu padre y tienes que vivir toda la vida sin él.

Toda tu vida da un vuelco siendo todavía una niña.

—Sí, a mí me rompieron la vida cuando tenía 4 años y a mi hermano con 7 años. Esto me ha forjado la forma de ser que tengo hoy en día, y tengo que agradecer a mi madre que nos educara en el amor y no en el odio. Ella siempre habló del tema, no fue un tema tabú, y nunca nos puso en contra del País Vasco. Pero yo he padecido una pérdida tremenda al criarme sin padre.

Y a ello hay que sumarle la falta de apoyo social en ese años.

—Nosotros nos fuimos de San Sebastián, porque en aquella época era todo bastante complicado. Las víctimas duramte muchísimos años no han sido tratadas ni con cariño ni con la deferencia que merecían. La falta de apoyo era terrible en el País Vasco, pero en España también. No hay más que recordar que la primera ley española de apoyo a víctimas del terrorismo es del año 2002. En el País Vasco parecía que eras tú el que habías hecho algo y que tenías que pedir perdón por ello, pero a nivel estatal tampoco había un apoyo tremendo. Por ejemplo, en nuestro caso no tuvimos problemas económicos, pero sí que hubo muchas familias que económicamente se quedaban fatal y el único apoyo que recibieron fue por parte de la AVT. La dejación que se ha hecho ha sido grande a todos los niveles.

¿Los actos u homenajes institucionales reparan o resarcen de algún modo el daño causado?

—Sí, aunque es verdad que entre medias ha pasado mucho tiempo. A mi padre lo mataron en 1980 y el primer acto que se hizo en reconocimiento fue uno del Ayuntamiento de San Sebastían en 2003. Y después uno en 2008 en la UPV. Hay que decir que ayuda ver cómo evoluciona el tema, porque en el primer acto del 2003 hubo gente insultándonos a la entrada.

En medio quedaron muchos años de silencio.

—Sí, pasó mucho tiempo y me da pena que los padres de mi padre o mi madre, que murió en el 93, nunca vieran estos homenajes. Pero si por lo menos la sociedad va avanzando, se condena tajante y firmemente el terrorismo y lo que fue, y no se pasa página mirando a otro lado; es de agradecer.

En su caso, ¿cree que no se investigó a fondo el crimen?

—Ahí no puedo opinar porque yo tenía 4 años. Mi madre nos habló siempre del tema con total naturalidad pero teniendo en cuenta la edad que teníamos mi hermano y yo. Y por desgracia mi madre falleció cuando yo tenía 17. Entonces, tampoco puedes conocerlo al detalle. Aunque es un tema que a estas alturas a mí no me aportaría nada e incluso si hubiese un nuevo juicio me removería cosas y no me ayudaría. El daño me lo hicieron matando a mi padre.

¿Cómo cambio vuestra vida cuando tuvisteis que dejar Gipuzkoa?

—Muchísimo. Para empezar, perdimos relación con la familia de mi padre porque siguieron viviendo en San Sebastián. Yo tengo más relación con ellos ahora y nos hemos dado cuenta de cómo el asesinato no solo afectó a la familia más cercana, sino a la familia entera. Los hermanos de mi padre se quedaron también destrozados y mis primos eran más mayores que yo y lo vivieron muy de cerca. Además, a mi padre lo asesinaron muy joven, tenía 37 años, y mi madre se quedó viuda con 34 años, eran personas muy jóvenes.

2023-03-11T06:14:07+01:00
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