La familia del Club Atlético Osasuna ha procedido este mediodía a la tradicional visita y ofrenda en la basílica de San Francisco Javier. Una amplia representación de la entidad en todos sus estamentos acudió al santo de Navarra como cada comienzo de temporada, esta si cabe más especial tras dos décadas de ausencia en competiciones europeas.
Al término del acto ha comparecido Luis Sabalza, quien habla de "una tradición histórica y bonita. Cantidad de niños que han venido a disfrutar del equipo y del santo" para repasar la actualidad rojilla una vez se ha pasado el mal trago con las dudas de la presencia en el verde tras ganarse estar presente en la Conference League con la brillante temporada firmada por la muchachada entrenada por Jagoba Arrasate.
El presidente ha querido mandar un mensaje de humildad con vistas a lo que pueda deparar el nuevo curso, habiéndole pedido al santo en "dos cosas: que sigamos en Primera y pasemos la Conference, que hay mucha ilusión de tener partidos entre semana".
Sabalza reconoce que esta temporada repartida en tres frentes "tiene muchas dificultades pero es ilusionante. Osasuna nunca se rinde y tiene mucho mérito. Con esa final en Sevilla que los aficionados disfrutaron, a ver si podemos disfrutar también en la Conference".
El máximo responsable del club pamplonés desde diciembre de 2014 tiene por tanto el objetivo de la 2023-24 "clarísimo: mantener la categoría, si puede ser con solvencia, mejor. Si no, luchando hasta dejarnos el alma. Es lo más importante porque institucional y deportivamente es bueno, y para los aficionados no es lo mismo estar en una categoría que en otra. Hay que luchar con todas nuestras fuerzas", señala.