Los gatos son animales muy independientes pero también necesitan cuidados y atención. Con la llegada del verano, muchas familias aprovechan para irse de vacaciones pero, si se tiene una mascota, es importante tener en cuenta cuánto tiempo puede quedarse solo en casa en verano.
Hoy en día existen muchas comodidades como el comedero y bebedero automáticos, pero esto no significa que nuestro gato pueda quedarse solo durante varios días sin ningún tipo de supervisión. En nuestra ausencia son muchos los peligros a los que se expone: Si le dejamos mucha comida a su alcance puede animarle a comer en exceso y hacer que enferme, puede que derrame el agua del bebedero o que no quiera utilizar el arenero porque está sucio.
La entrada en vigor de la nueva Ley de Bienestar Animal establece un máximo de tres días como el tiempo que un gato puede permanecer solo en un domicilio. Sin embargo, lo más recomendable es que el gato no se quede solo más de un día. Lo mejor es que un amigo o familiar visite nuestra casa al menos una vez al día para cambiar la comida y el agua y limpiar el arenero del animal.
Si vas a pasar un tiempo fuera de casa, aquí tienes seis consejos que debes tener en cuenta a la hora de dejar solo a tu gato.
Agua y comida. Lo principal es dejar llenos los recipientes donde come tu gato y llenar de agua el bebedero antes de irte. También es recomendable dejar platos adicionales repartidos por el resto de la casa. Otra opción es colocar un dispensador automático de comida, que se programa para que se abra a la hora elegida. Si te decides por esta opción, empieza a utilizarlo unos días antes para que tu gato se acostumbre.
Areneros. Aunque tu gato esté acostumbrado a su arenero, deja otro en algún punto de la casa. Si no hay nadie que limpie el primer arenero este se llenará y tu gato se negará a entrar. Sin embargo, debes tener en cuenta que tienes que acostumbrarlo a usar el segundo arenero antes de irte.
Puertas interiores de la casa abiertas. De esta forma, podrá acceder a los areneros, la comida y la bebida, además de a sus rincones favoritos. Si está acostumbrado a circular por las habitaciones y de repente se encuentra con las puertas cerradas, esto podría causarle estrés, al no entender por qué no puede ir a su rincón preferido.
Gato tumbado en una silla de la cocina.
Distracciones. Deja juguetes y rascadores a su alcance para que pueda entretenerse. Si vas a pasar solo un día fuera de casa, también puedes dejar una radio encendida para que no se sienta tan solo. Al escuchar voces humanas, tu gato notará menos tu ausencia.
Medicamentos o productos peligrosos. No dejes a su alcance este tipo de artículos, ya que si se aburre mucho, puede husmear por la casa y encontrarlos. Piensa también en cables, hilos… los gatos son muy curiosos y sin vigilancia puede resultar peligroso.
Ventanas cerradas. Asegúrate de dejar bien cerradas las ventanas y todas las posibles salidas para evitar que se escape durante tu ausencia.
Así que ya sabes, si te vas a ausentar lo más recomendable es no dejar al gato solo más de un día. Si vas a pasar fuera de casa más tiempo, pide a un amigo o familiar que vigile a tu mascota al menos una vez al día para asegurarse de que todo va bien y no hay ningún problema.