Faltan ya menos de 24 horas para que se prenda la mecha del cohete anunciador de las fiestas de San Fermín. Pamplona, una ciudad tranquila durante el año, volverá a acaparar las miradas de medio mundo con las fiestas más internacionales que existen y los pamploneses se transformarán durante 8 días para dar rienda suelta a su vena festiva cuando estalle el Chupinazo.
Este año millones de ojos estarán puestos sobre Duguna, el grupo de Dantzaris de Pamplona, que arrasaron en la votación popular con un 39 % de los votos y que serán los encargados de disparar el Chupinazo en el año de su 75º aniversario. Van a pasar de acompañar todos los actos principales de las fiestas a protagonizar el momento cumbre del 6 de julio a las 12:00 del mediodía. Será entonces cuando prendan la mecha y entonen en euskera y castellano el tradicional 'Pamplonesas, pamploneses, ¡Viva San Fermín! Iruindarrak, Gora San Fermín!'. De hecho, esta es la única frase que se puede decir en el momento del inicio de las fiestas. En concreto, representarán al grupo su director Aritz Ibáñez, el presidente Ángel Arana y la dantzari Itxaso Martínez de la Pera, que ayer ya acudieron al balcón consistorial para ensayar ese breve pero tan simbólico momento.
Será entonces cuando comiencen 8 días de fiesta ininterrumpida que este año tienen la particularidad de que abarcan dos fines de semana, lo que va a hacer que Pamplona esté totalmente abarrotada tanto en el inicio como en el final de las fiestas.
Entre medias, los ocho encierros, la procesión el domingo por la mañana o actividades enfocadas al público infantil como los gigantes y cabezudos, que son los más queridos de la casa. Y mucha música, como la que pondrán en la plaza del Castillo Izaro, Zetak, Gorka Urbizu o El Drogas.
El acto más multitudinario volverán a ser los fuegos artificiales, en la Ciudadela, con un concurso de fuegos de autor más internacional que nunca ya que seis diseñadores y sus pirotecnias serán extranjeros.
Todo ello hasta llegar al Pobre de Mí, que trae la novedad de un concierto previo, aunque en un día 5 de julio nadie quiere mirar todavía en Pamplona al día 14.
Todos los ritos presanfemineros se han ido cumpliendo. El antideslizante está aplicado en el recorrido del encierro, la tómbola de Cáritas instalada y ha entrado en vigor la zona naranja de aparcamiento en toda la ciudad. Este mismo viernes también se ha retirado la réplica de la imagen de San Fermín de la hornacina de la Cuesta de Santo Domingo. La original, que preside el primer tramo del encierro desde 1978, se coloca a diario poco antes del comienzo del encierro.
Hoy es día de sacar la ropa blanca del armario y buscar fajas y pañuelos. En Pamplona se respira esa tensa calma que precede a los Sanfermines. Para muchos hoy es el último día de ir al trabajo, hacer compras y planchar el atuendo sanferminero. A partir de mañana, el plan es que no hay plan.