La figura de San Fermín estrena esta mañana del 7 de julio en la procesión un nuevo manto, rojo y con bordados en oro y plata, confecionado en Córdoba.
El manto, que ya fue presentado el pasado 6 de junio en la misa de la escalera, ha sido realizado por el Taller de Bordado de Rafael Carmona de Córdoba y el diseño de Óscar Ruiz Ramírez. Ha sido sufragado por un grupo de los devotos de San Fermín y de donativos particulares, que además han permitido un donativo a Cáritas y a otras instituciones que lo destinarán a los afectados por la guerra de Ucrania.
En la parte central del capotillo aparecen los arcos de la mezquita catedral de Córdoba, y están situados San Lorenzo y San Saturnino. El capillo, en su parte más trabajada, representa a San Fermín y San Francisco Javier sosteniendo el escudo de “nuestro viejo Reyno”. Está inspirado en la obra del pintor Gregorio Fosman y Medina (1684) y culminado por la corona en bordado realce en simbología al Reino de Navarra. Durante la Mesa de la Escalera, además de estrenar el capote (el segundo en pocos meses), se homenajeó a los miembros del coro parroquial.
En la presentación acudieron los integrantes de la junta que organiza la Misa de la Escalera, como José Manuel González Viniegra, Fernando Munárriz, María Esquíroz, Roberto Fuertes, Jesús González (Txutxín) o Mari Arraiza.