Beñat Rezusta transita por la pelota a mano profesional con la severidad de una figura y la modestia de un obrero en la cancha. Sin embargo, el zaguero de Bergara se encuentra este domingo a apenas 22 tantos de meterse en la historia en el Adarraga de Logroño (17.00 horas). Con cuatro cetros de la feria de San Mateo, está empatado en títulos en la cúspide histórica de guardaespaldas con Ladis Galarza (1984, 1987, 1988 y 1995) y Patxi Ruiz (2001, 2002, 2006 y 2010).
Además, en el listado de campeones se sitúa a la misma altura de los delanteros Julián Retegi (1982, 1990, 1992 y 1995) y Oinatz Bengoetxea (2006, 2007, 2010 y 2013). En ese ranking, Rezusta y el delantero de Leitza comparten el honor de no haber caído en ninguna final. Todo caras. Por delante, casi inalcanzable, está Titín III. El de Tricio, con ocho títulos (1996, 1997, 1998, 1999, 2003, 2005, 2008 y 2012), es el rey de la pelota logroñesa.
El pelotari de Bergara es el actual guardaespaldas campeón, pues conquistó el cetro junto a Joseba Ezkurdia, precisamente contra los rivales de este domingo en Logroño: los rutilantes pegadores Javier Zabala y José Javier Zabaleta. Asimismo, se llevó la cita cumbre de La Rioja en 2016 con Ezkurdia, en 2017 con Víctor Esteban y en 2019 con Aimar Olaizola.
Un enorme Iztueta
Unido a Peio Etxeberria y provenientes de la previa, en la que actuó Darío, que se fastidió las manos en un partidazo, forman una combinación muy dura de roer. De hecho, en la decisiva cita contra Peña II-Albisu, el zurdo dio una lección contra una grandísima versión de su homólogo ataundarra. Los manistas de Aspe remontaron del 16-12 al 18-22.
Zabaleta, en un encuentro anterior.
Zabala y Zabaleta, entretanto, forman con la presión de ser favoritos desde la parrilla de salida. En la liguilla vivieron, no obstante, dificultades. En su primer compromiso sometieron a un asedio a Altuna III y Aldabe, suplente de Tolosa, pero acabaron sufriendo (20-22). En el choque decisivo, entretanto, se vieron beneficiados por la lesión de Iñaki Artola con el 0-6 en el marcador a los 11 minutos de juego y apenas 77 pelotazos a buena. Las empresas reaccionaron con un partido especial para soliviantar a la parroquia que pobló el Adarraga: el riojano y el de Etxarren ganaron a un trío formado por Agirre-Salaberria-Salaverri II (9-18).