La ministra portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, pidió ayer miércoles al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que aclare qué reformas quiere derogar, más allá de contárselo a los fiscales con los que se reunió en secreto.
Según publicó el pasado martes el diario El País, en dicho encuentro fuera de agenda los fiscales conservadores animaron al líder del PP a derogar varias leyes aprobadas durante la actual legislatura.
La ministra portavoz arremetió por ello contra Feijóo al señalar que “lo grave no es que se produjera la reunión, sino el objeto” de la misma: “la instrumentalización de la justicia”.
Insistió Rodríguez en la “gravedad de ese encuentro” y en la falta de “transparencia” sobre lo allí expresado y que luego no explica a los ciudadanos, lo que pone de manifiesto su “afán de derogación”, de “no proponer nada” y de ir en “contra de todo” lo que hace Moncloa.
“¿A qué se estaba refiriendo Feijóo cuando ante los fiscales decía que iba a hacer un real decreto de derogación?, se preguntó, antes de exigirle que explique si se refería a la reforma laboral, a la subida del salario mínimo o la del sistema de pensiones.
Derogar el ‘sanchismo’
Por su parte, el coordinador general del PP, Elías Bendodo, enmarcó en la “normalidad” la cena que el líder de su partido mantuvo con fiscales el pasado 18 de abril y señaló que lo que el PP quiere derogar son “las malas prácticas del sanchismo”, como viajar en Falcon a actos del PSOE o nombrar fiscal general del Estado a una persona que ocupó el cargo de ministro con ese Gobierno, en alusión a lo que ocurrió con Dolores Delgado.
“Los dirigentes políticos de este país se reúnen, hablan, dialogan, no solo entre ellos, sino con muchísimos colectivos de todo tipo. Debe ser lo normal”, declaró Bendodo en una rueda de prensa en la sede del PP para presentar la campaña ante las elecciones de mayo.
Además, el número 3 del PP subrayó que “no solo” Feijóo se ha reunido con miembros de la Fiscalía o de la judicatura, porque “en los últimos tiempos también lo hizo el presidente Sánchez” en la “sede socialista” de Ferraz.
Por eso, insiste en que ese encuentro de Feijóo debe “enclavarse dentro de la normalidad” de las “reuniones” y el “diálogo” que un político mantiene “con todos y en todos los ámbitos”. A partir de ahí, concluyó, no hay que darle “más relevancia”.