El Ministerio de Sanidad ha publicado unas recomendaciones para prevenir los ahogamientos, que fueron la tercera causa de muerte por causas externas en 2020, especialmente, en los grupos de población más jóvenes.
En el Día Mundial de la Prevención del Ahogamiento que se conmemora este 25 de julio, Sanidad aconseja extremar las precauciones en los entornos acuáticos donde se producen los ahogamientos, pero también casos de traumatismos craneoencefálicos y de lesiones medulares, generalmente provocadas por imprudencias como tratar de zambullirse desde gran altura, no comprobar la profundidad del agua o, en el caso de piscinas, tirarse demasiado cerca del bordillo.
En 2020, fallecieron en el Estado 406 personas (334 hombres y 72 mujeres) a consecuencia de lesiones graves ocurridas en el medio acuático y 461 personas fueron hospitalizadas en relación con un ahogamiento.
Además, 61 personas fueron hospitalizadas como consecuencia de las lesiones producidas al saltar o tirarse de cabeza al agua (excluyendo caídas) y 8 ingresos hospitalarios fueron por lesión medular.
Sanidad alerta de que las conductas de riesgo en relación con los ahogamientos se suelen dar en los momentos de relajación en la vigilancia de menores, por bañarse en zonas sin vigilancia o por consumo de alcohol y otras drogas cerca o dentro del agua.
También, una parte importante de los accidentes relacionadas con el agua se tienen que ver con algunas condiciones médicas como la epilepsia.
Con el objetivo de reducir estos incidentes, ya que en su mayoría son prevenibles, Sanidad recomienda:
- Vigilar a los menores en todo momento cuando estén en el agua o jugando cerca de ella y no delegar esta responsabilidad en otro niño más mayor.
- No dejar solo en ningún momento a un bebé o niño de corta edad en una bañera o piscina hinchable.
- Asegurarse de que la piscina cuente con socorrista y no correr por el borde de la piscina
- Si no se sabe nadar, o no se sabe nadar bien, utilizar un chaleco salvavidas para bañarse y usarlo siempre para practicar un deporte acuático.
- En la playa, respetar el significado de las banderas.
- En el mar, ante el cansancio o la dificultad para volver, nadar de espaldas moviendo las piernas solamente hasta llegar cerca de la orilla. Si arrastra una corriente, debe nadar paralelamente a la playa y, una vez que se haya salido, nadar hacia la orilla.
- Recordar que el consumo de alcohol disminuye la capacidad de reacción ante un peligro o puede propiciar el adoptar conductas de riesgo.
- Evitar bañarse de noche y tirarse de cabeza desde una gran altura, desde puentes, árboles o balcones, puede producir lesiones muy graves.