El Ministerio de Sanidad ha informado que el test genético para virus de Marburgo realizado por el Instituto de Salud Carlos III de Madrid descarta la presencia de este virus en la muestra remitida desde la Comunidad Valenciana por un caso sospechoso. Asimismo, se ha descartado también que se trate de virus de ébola.
El caso de Valencia era el único en investigación en España tras el brote del virus de Marburgo detectado el día 13 de febrero en Guinea Ecuatorial.
El paciente, un varón de 34 años, presentaba síntomas compatibles con la enfermedad del virus de Marburgo, similar al del Ébola, y estuvo en Guinea Ecuatorial durante un periodo de tiempo que se podría corresponder con el de incubación y desarrollo de la dolencia.
En la actualidad, permanece ingresado en la Unidad de Aislamiento de Alto Nivel del Hospital La Fe de Valencia.
Por su parte, el Ministerio de Sanidad acaba de publicar un protocolo de actuación para la "detección precoz y manejo" de pacientes con el virus Marburgo, coincidiendo con el caso sospechoso detectado en valencia que acaba de ser descartado.
Evitar riesgos para la población general
Además, fuentes del Ministerio de Sanidad han subrayado este sábado que "España dispone de una red de unidades de aislamiento de alto nivel para enfermedades infecciosas de alto riesgo" y que "la detección precoz de casos" permite evitar riesgos para la población general.
El brote, primero del virus de Marburgo que se declara en Guinea Ecuatorial, se detectó el 13 de febrero en la provincia de Kié-Ntem, en el oeste de la parte continental del país y fronteriza con Camerún y Gabón, después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmase la muerte de al menos nueve personas por la enfermedad.
La enfermedad por el virus de Marburgo es tan mortífera como la del Ébola y se estima que en África ha causado la muerte de más de 3.500 personas.
Al igual que el Ébola, ese virus provoca hemorragias repentinas y puede producir la muerte en pocos días, con un período de incubación de 2 a 21 días y una tasa de mortalidad de hasta el 88%.
La enfermedad, para la que no hay vacuna ni tratamiento específico, fue detectada en 1967 en la ciudad alemana de Marburgo -origen de su nombre- por técnicos de laboratorio que resultaron infectados cuando investigaban a monos traídos de Uganda.