El Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo que prepara el Ministerio de Sanidad para que sea una realidad este año, incluye impulsar medidas fiscales que graven el precio del tabaco, ya que el Estado español se encuentra entre los países con los precios más bajos de Europa, y su subida sería considerada además una medida disuasoria para frenar el consumo entre los jóvenes.
No obstante, según han confirmado fuentes del Ministerio de Sanidad a Europa Press, para su desarrollo debe contar con Ministerio de Hacienda y Función Pública que es "quien tiene la última palabra", ya que "Sanidad no tiene competencia".
Tal y como adelanta la Cadena SER, la estrategia pretende "impulsar el establecimiento de medidas fiscales consistentes en el incremento de los tipos impositivos de los productos incluidos en el ámbito objetivo de Impuesto sobre las Labores del Tabaco, a fin de lograr un incremento de los precios de dichos productos".
Además, respecto a las nuevas formas de tabaco, la estrategia pretende "promover la creación de una nueva figura impositiva que establezca un gravamen específico para los cigarrillos electrónicos con nicotina".
"Todas las sociedades científicas recomienda que se haga", señalan a Europa Press las misma fuentes. Desde hace años sociedades médicas y científicas piden, en consonancia con la estrategia antitabaco de la Organización Mundial de la Salud (OMS), subidas de impuestos en los productos con nicotina ya que reducen el consumo, alientan a los fumadores a abandonar el tabaco y disuaden a los jóvenes de adoptar la hábito de fumar.