Santurtzi y Plentzia homenajean hoy a la Virgen del Carmen con sus procesiones marítimas

Varias localidades vascas, entre ellas, Santurtzi y Plentzia homenajean hoy sábado 16 de julio a la patrona de los "hombres y mujeres del mar", (arrantzales, pescadores, neskatilas, sardineras,,,).

PROCESIÓN SANTURTZI

En el caso de Santurtzi, dado el carácter marinero del que fue el puerto vizcaíno de referencia en la pesca de bajura, la procesión marítima que comenzará a las 18h, es la más antigua de la CAV. En esta tradicional procesión del Carmen los arrantzales, las hijas y nietas de sardineras, acompañados de las autoridades, grupos de danzas y bandas de música, llevan la imagen de la Virgen del Carmen desde su parroquia hasta el puerto pesquero, donde es embarcada en una lancha. Ya en la mar, todas las embarcaciones engalanadas para la ocasión, la acompañan hasta El Abra, donde se realiza una ofrenda floral en memoria de los arrantzales (pescadores) fallecidos.

Ya de regreso en tierra, los grupos de danzas homenajean a las sardineras de Santurtzi con una danza tradicional, recordando su importante y duro trabajo: con los pies descalzos y un cesto en la cabeza, recorrían la orilla hasta el mercado de Bilbao para vender sus famosas sardinas.

PROCESIÓN PLENTZIA

A partir de las 18.30 horas, la Virgen del Carmen entrará al agua, acompañada por las autoridades municipales de Plentzia y Gorliz, pero la bajada desde la iglesia hasta la ría, a la altura del puente, dará inicio a las 18.00 horas.

La imagen de la Virgen del Carmen presidirá el barco "Under water wine " y 40 embarcaciones le acompañarán. La procesión llegará hasta Gorliz y, como siempre, quienes forman parte de ella, saludarán con sus pañuelos blancos al personal y personas ingresadas en el hospital.

ORIGEN DE LA PROCESIÓN MARÍTIMA DE LA VIRGEN DEL CARMEN

El origen de esta festividad se encuentra en la leyenda que cuenta que la Virgen salvó un barco inglés a la deriva, en medio de una fuerte tormenta. En mitad de la desesperación, uno de los marineros salió a rezar, se arrancó el escapulario de la orden Carmelita y lo tiró al mar. Eso hizo que la tormenta se detuviera inmediatamente.